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«Clientes de grandes ciudades nos dan las gracias por venderles ‘ternera de verdad’»

- Aída Rodrigo y David García han unido sus vidas en torno a un proyecto de cría, despiece y venta online de vacas autóctonas Parda de Montaña en Murias de Paredes. En pandemia crearon la marca ‘Tu ternera en casa’ para no «poner todos los huevos en la misma cesta». Ahora se lanzan también online con productos de kilómetro cero.

León

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Murias de Paredes fue cabeza de partido judicial y de una de las comarcas más ganaderas de León. La vieja cárcel de la jurisdicción es ahora hotel rural y la casona de los condes de Luna el centro de interpretación de la Reserva de la Biosfera de los Valles de Omaña y Luna. La ganadería pervive en nueve explotaciones locales. Aún se ven tractores y las praderas se siegan en verano para acopiar hierba para el invierno.

En este entorno paradisíaco, parte del espacio Sipam Montañas de León reconocido por la FAO como uno de los lugares de la Tierra donde los usos agrarios conviven con el respeto al medio natural y se producen alimentos de calidad, se crían más de un centenar de vacas y terneras de recría de la raza autóctona Parda de Montaña en la Ganadería Omaña-Cea TC.

 La empresa empezó de la mano de un joven que nació y vivió hasta los seis años en Murias de Paredes y que, tras criarse y estudiar en León un módulo de administración y finanzas y confirmar que la banca no era lo suyo, se enroló en el Ejército para ahorrar dinero y cumplir su sueño. Al cabo de cinco años, en 2012, David García Mallo viajó a Huesca con un amigo y compró las primeras 25 vacas Parda de Montaña, una raza en peligro de extinción. Cuando empezaron a producir construyó las naves. «Lo de la ganadería lo tenía claro desde pequeño; era sí o sí», asegura.

El portal tuterneraencasa.com es su punto de venta. La tienda online se amplía ahora a la distribución de alimentos kilómetro cero a través de la plataforma asociada alimentoskm0.com 

Aída Rodrigo García es oriunda de Puente Almuhey. Estudió Derecho, ha estado colegiada y trabajó como asesora en el Congreso de los Diputados en la primera legislatura de Zapatero. Luego dejó la política y retornó a León y abrió un hostel en la capital, siguiendo la tradición hostelera de su familia, hasta que decidió regresar al pueblo y ponerse al frente del hotel. A caballo entre el Cea y Omaña durante un tiempo, la pandemia inclinó la balanza por Murias de Paredes. «Tuvimos que cerrar el hotel y eso me dio inseguridad. No me quitaron ni letras ni hipoteca, ni nada. Solo recibí dos mil euros de la Junta». Tramitaron y consiguieron la titularidad compartida de la explotación ganadera y en 2021 sacaron al mercado la marca Tu tenera en casa. Carne de la Montaña Leonesa. Actualmente tienen clientes en toda España,  con las islas, y Andorra.

David está en su salsa y Aída se ha adaptado tan bien que cultiva una huerta, aunque no come tomates, y llama al ganado con la misma voz briosa que su compañero. Ese canto de los vaqueros que dominan el verbo para hablar con el ganado.

«Pedimos una fiscalidad específica para el medio rural. Pagamos los mismos impuestos que en la Castellana y tenemos menos servicios. Deben apoyar a quienes estamos para no irnos»

«Me confiné en Murias y decidimos poner los huevos en distintas cestas», explica. Como experta en derecho y como empresaria estaba familiarizada con los trámites legales y los requisitos de limpieza, horarios, etcétera. «Empezamos a hacer venta directa, pero teníamos una sala de despiece en León capital alquilada», explica. 

Desde hace unos días, con los parabienes de Sanidad, hacen todo en Murias, desde la cría hasta el envasado y envío a los diferentes puntos de la Península y las islas en transporte refrigerado. «Tenemos lista de espera hasta 2024», subrayan. «Es carne natural que no se encuentra en las grandes ciudades». Son terneras de menos de un año, entre siete y nueve meses. «Hay clientes de grandes ciudades que te dan las gracias por darles la posibilidad de consumir ternera de verdad. Son clientes que valoran lo que comen». El portal tuterneraencasa.com es su punto de venta. La tienda online pronto será un punto de distribución de alimentos kilómetro cero a través de la plataforma asociada alimentoskm0.com.

«La Junta no promociona las ganaderías ecológicas; no entiendo por qué. Las macrogranjas y cebaderos están en manos de cuatro, pero parece que es lo que diera de comer a Castilla y León»

«Muchas personas nos pedían que con la carne les enviáramos otros productos (estamos enviando pan desde Murias de Paredes) y decidimos crear esta plataforma a la que se pueden adherir todos los productores nacionales del sector primario que elaboren alimentos de calidad», explica Aída Rodrigo. Su activismo en redes sociales, junto a la calidad del producto, ha sido clave en la expansión del negocio. «Vendemos online porque nos conocen por las redes sociales. Estamos en Instagram, Youtube, Facebook y TikTok»», explican. Venden lotes degustación desde 10 kilos y sus hamburguesas naturales se agotaron el primer día que salieron a la venta. No se sintieron agredidos por las palabras del exministro de Consumo, Alberto Garzón. «Vi las intervenciones completas y hablaba de macrogranjas y macrocebaderos, que precisamente es lo que más abunda en Castilla y León», apostilla Rodrigo. Lamenta que la administración autonómica ponga todos los esfuerzos en apoyar a este sector mientras «no promociona las ganaderías ecológicas; no entiendo por qué. Los cebaderos están en manos de cuatro y parece que es lo que de ir a de comer a Castilla y León».

«Es cierto que con la ganadería extensiva no se daría abasto para atender el consumo actual», admite David García. «Aquí no tenemos otra manera de producir. La rentabilidad está en que la mayor parte del tiempo pastan en el monte», añade. Hay más pastos de los que reconoce la PAC como terrenos admisibles para las ayudas de la Unión Europea. «Hay muchos terrenos que no son admisibles porque hay vegetación pero, debajo de eso, es donde come el ganado en un año seco», señala el joven. Es una batalla por la que pelean desde hace años el sector ganadero de montaña y trashumante y los municipios afectados. «Deberían de tener en consideración que en el medio rural, o vives de la ganadería y agricultura o del turismo», apostillan. Y además, en zonas como Murias de Paredes, «convivimos con varias especies protegidas: el oso, el lobo y el urogallo». Desde la primavera hasta ahora «nos han desaparecido cinco vacas, pensamos que por oso o lobo. Pero si no encuentras los restos no te lo pagan. Cuentas con ello, pero lo que no puede ser es que no haya control poblacional», subrayan.

La falta de servicios —«cada vez hay menos y pagamos los mismos impuestos»— y los falsos mitos —«la gente cree que estamos subvencionados y no es real»— son la cruz de una moneda que se compensa con creces con la cara. Otra idea a desterrar es que la gente es paleta o no tiene formación. Ellos porque tienen títulos y experiencias que prueban su valía y la gente del pueblo porque tiene una sabiduría que ya quisieran muchos de ciudad. «Salí de un pueblo y estudié y trabajé. Mi hermano es ingeniero espacial y salió de un pueblo». Volver al pueblo, ha cambiado su vida. «Andaba todo el día para arriba y para abajo; ahora estoy en calma y no echo de menos ir a León en un mes», señala. «La calidad de vida que te da el medio rural no la tienes en la ciudad. Tienes tus horarios, tus hábitos y sigues viviendo  en comunidad», añaden. Valoran tener cerca a amigos y familia y una cosa muy especial que se da en los pueblos, sobre todo en los que tienen bar: «Los pueblos unen a las generaciones. Comemos con personas de 70 años y estamos juntos con independencia de la edad», comentan.

Como reivindicaciones, plantean «una regulación fiscal específica para el medio rural» al recordar que para la inversión en la sala de despiece no han recibido ninguna ayuda. «Da igual que contrates a una mujer o a siete —como le pasa a la casa rural— que seamos jóvenes menores de 40 años; solo hay ayudas para el que empieza». Proponen medidas como bonificaciones de la Seguridad Social y que las sociedades limitadas del medio rural «no tributen igual que en la Castellana» de Madrid. «Para lo que quieren somos pocos, para lo que no, no lo tienen en cuenta y nadie se plantea modificar la ley electoral», añaden. Piden apoyo para que «los que estemos no nos vayamos y nos ayuden a crecer y a tener empleados. «Me gustaría ver un político con mando que viva en el medio rural y haya sido autónomo alguna vez en su vida», señalan mientras piden menos observatorios de despoblación y más apoyo.

También animan a la gente joven a mirar hacia el mundo rural como una oportunidad. «Si te puedes comprar un piso en una ciudad, puedes empezar de cero en un pueblo», sentencia Rodrigo, para quien «la verdadera revolución del siglo XXI es volver al pueblo, no estar en un despacho dando vueltas como un hámster y compartiendo piso». Convencida de las numerosas habilidades y capacidades de cada persona, ve en el medio rural incluso una vía de negocio para la abogacía. «Me especializaría en medio rural y ganadería», añade. Hace falta, argumenta, un cambio de mentalidad: «Si puedo ir desde Puente Almuhey a León a hacer una consulta, también podré ir desde León a Puente Almuhey». Aída Rodrigo forma parte de Ganaderas en Red (GER). «Algo de machismo sí hay en el entorno ganadero. A más de uno le he tenido que decir que yo cotizo de ganadera y lo dice la Seguridad Social y Hacienda». Además de criar la Parda de Montaña están en la Asociación para la Recuperación de la Mantequera Leonesa. Han rehabilitado una casa y cuentan sus experiencias en el programa De la Tierra de La 8.