Defensa garantiza las bases de Astorga y León tras cerrar la compra de los lanzacohetes
Gran parte de estos nuevos equipos irán destinados al Ralca con base en el acuartelamiento maragato de Santocildes
Imagen de una demostración realizada en el acuartelamiento Santocildes de Astorga. A. RODRÍGUEZ
El Ministerio de Defensa adjudica por 700 millones de euros un nuevo sistema lanzacohetes que garantiza el futuro del acuartelamiento de Astorga, ya que la mayoría o, al menos, una buena parte de él, irá destinado al Ralca 63 (Regimiento de Artillería y Lanzacohetes de Campaña) con base en el cuartel de Santocildes de la ciudad maragata.
Según publicaba este lunes el portal infodefensa.com, el Ministerio de Defensa acaba de adjudicar a la unión de empresas Escribano Mechinal & Ingineering y Rheinmetall Expal Munitions el conocido como ‘Sistema Lanzacohetes de Alta Movilidad (Silam) por cerca de 700 millones de euros.
Se trata del sistema PULS, un lanzacohetes diseñado por el grupo israelí Elbit Systems. Según explica la web especializada en asuntos de Defensa, el programa incluye la transferencia de tecnología para la fabricación tanto de lanzacohetes como de munición en España.
La adquisición incluye un suministro inicial de 12 lanzacohetes con munición con un alcance de hasta 300 kilómetros. A ellos hay que añadir un vehículo lanzador demostrador, 12 vehículos de municionamiento con grúa, dos de recuperación, seis vehículos de alta movilidad de reconocimiento, diez vehículos de puesto de mando, apoyo logístico, medios de instrucción, adiestramiento y simulación y plataforma lanzacohetes para pruebas y validación de las municiones. Además se incluye munición, radares y drones.
Como ya adelantó el Diario de León el pasado 1 de octubre, esta compra se enmarca en la modificación de los límites de gasto para modernizar las Fuerzas Armadas, y cumplir con las exigencias de la Otan, para lo que el Consejo de Ministros aprobó el nuevo programa Silam, como respuesta a la necesidad operativa planteada por del Ejército de Tierra para dotarse de un sistema de lanzacohetes «capaz de proporcionar apoyos de fuego a distancia superior a lo que permiten los sistemas de cañón, con gran precisión y variedad de municiones que posibiliten la consecución de los efectos requeridos sobre distintos tipos de blancos». Este programa para la adquisición de lanzacohetes de alta movilidad Silam, un proyecto que está previsto que desarrollen empresas españolas, cuenta con una partida presupuestaria de 714,5 millones de euros que se desglosarán entre 2023 y 2027, como se concretó en el Consejo de Ministros.
Este sistema de lanzacohetes tendrá como destino el acuartelamiento de Santocildes, en Astorga, dependiente del Maca y que perdió su capacidad operativa en 2011, cuando se dio de baja el sistema Teruel, obsoleto tras 30 años en servicio y tras haber sobrepasado su vida útil. Ahora, España recupera esta capacidad operativa, a pesar de que el personal de la capital maragata se mantenía activo, pese a no contar con el material.
El primer paso dado por el Maca para impulsar la modernización de sus unidades fue la llegada en septiembre de la munición estadounidense Excálibur.