Las cuencas siguen esperando respuestas después de cinco años
Desde que finalizó la minería del carbón en España el 31 de diciembre de 2018 mucho se ha hablado de la transición justa y las recolocaciones de los excedentes mineros. Pero, cinco años después, muchos de estos trabajadores siguen esperando que les llamen para ocupar un puesto de trabajo en alguna explotación minera para restaurarlas, tal y como se acordó en un principio. a Y es que en el año 2021 La Comisión de Seguimiento del Acuerdo Marco para una Transición Justa de la Minería del Carbón y el Desarrollo Sostenible de las Comarcas Mineras para el Periodo 2019-2027 se reunían para analizar, entre otros puntos la situación del Plan social, a través de la Modificación del RDL 25/2018 y actualización del Plan Social Plan de Restauración Ambiental para explotaciones mineras en cierre o abandonadas. Cabe recordar que los excedentes mineros se encuentran inscritos en la bolsa de empleo que el ministerio de Teresa Ribera abrió hace tres años y en la que se contabilizan un total de 334 trabajadores, que no percibían ninguna retribución desde hacia meses. Aunque algunos de estos exmineros se han tenido que buscar otros empleos para tener un sustento económico, aún permanecen dentro de la bolsa de empleo y se les llamaría por si la oferta de recolocación pudiera interesarles cuando se inicien las labores. Y aunque algunos si fueron llamados, otros todavía se encuentran a la espera de ser llamados para comenzar su trabajo.
Las obras de restauración ambiental en los distintos cielos abiertos han dado comienzo hace más de un año, tanto en la vertiente leonesa como asturianas, así en la Gran Corta de Fabero comenzaban en mayo del 2022, que junto con otras restauraciones de la zona Bierzo, tienen un presupuesto de más de 70 millonesd de euros y la creación de 180 puestos de trabajo. Y en la zona asturiana, en el Grupo Cerredo, perteneciente al concejo asturiano de Degaña, daban comienzo en septiembre del 2022, cuenta con un presupuesto de 27 millones de euros, más los 3,7millones de euros depositados por las empresas mineras como aval.