Los agricultores inauguran una ronda de encierros para luchar por su supervivencia

Con emblemas como «Laciana vuelve a la lucha», «Con tu apoyo, lo conseguiremos» o «Los pueblos se mueren» los vecinos de Villablino salieron este miércoles a la calle para apoyar al sector ganadero y agrícola en la tractorada que se celebró en la capital lacianiega, y que concluyó con el primer encierro que se ha llevado a cabo en España, en una crisis que se ha extendido por todo el país desde que el pasado 1 de febrero los primero tractores se echaran a las carreteras en León.

Quince trabajadores del sector primario se encierra en el Ayuntamiento para que todas aquellas personas que lo deseen puedan informarse «de primera man»o de la situación por la que atraviesa el sector. Estamos en un estado de «extrema necesidad» declaraban ayer los protagonistas de esta iniciativa que se mantendrá hasta el próximo 28 de febrero, con turnos rotativos de los encerrados para que puedan atender a sus animales y sus tareas laborales.

La tractorada previa recabó todo el apoyo posible de los vecinos desde que se que congregaron en el polideportivo municipal de Villablino, para recorrer el casco urbano de la capital. Desde Subdelegación del Gobierno avisaron, minutos antes de la salida, de que no contaban con permiso oficial para la movilización.

Con la autorización del Ayuntamiento de Villablino, los organizadores consensuaron con los tractoristas y los vecinos congregados continuar con los planes iniciales y llevar a cabo la marcha por el casco urbano.

Los tractores abrieron la comitiva mientras cientos de lacianiegos animaban con aplausos y vitores a los agricultores y ganaderos de la marcha. Los comerciantes también se unieron a la protesta y varios establecimientos bajaron la persiana cuando la tractorada pasaba por su calle y salieron a aplaudir a los protagonistas del día. Otros, como Talleres Chema, decidieron cerrar durante toda la mañana como medida de apoyo.

Tras realizar el recorrido, la comitiva se dirigió a la Plaza Luis Mateo Diez, donde los ganaderos pidieron un aplauso a todos los vecinos que se sumaron a la causa. Uno de los organizadores, Lisardo Riesgo, verbalizó el agradecimiento: «quiero daros un aplauso por todo el apoyo, nunca pensamos que nos queríais tanto». A continuación leyó un manifiesto en el que expuso las reivindicaciones del sector y los problemas con los que conviven a diario. La lentitud de las administraciones, la especulación de precios, las trabas de la Unión Europea a través de la PAC o la presión de los grupos como ecologistas y animalistas «que no dejan controlar la fauna salvaje y que valoran más la vida de un lobo o de un oso, a la de un ternero o un cordero» .

Por el camino, alguno de los ganaderos expresaba sus inquietudes. Samuel Martínez, de 20 años, señaló que «meterse ahora mismo a ganadero es casi inviable», ya que si no tienes un poco de ayuda «tú solo no puedes hacer nada».

Por su parte, el alcalde de Villablino, Mario Rivas que asistió a la tractorada, afirmó que la ganadería forma parte del futuro del municipio y por lo tanto «tenemos la obligación moral y personal de apoyarlos».

Para rematar la jornada, que recordó la época de lucha minera de la comarca, una vecina les dedicó una poesía sobre la dureza del trabajo del campo.