Accidente del autocar escolar: el delegado del Gobierno vincula el suceso al mal tiempo
Nicanor Sen sostiene que no tiene confirmación de que el siniestro en el pantano del Porma se debiera a un exceso de velocidad
El accidente que sufrió el domingo en Boñar un autobús con un grupo de 25 escolares de Benavente (Zamora) y seis monitores que iban a pasar un día de nieve, en el que el vehículo chocó contra el quitamiedos y estuvo a punto de caer a un embalse, pudo deberse a las condiciones climatológicas adversas.
Así lo ha apuntado este lunes el delegado del Gobierno en Castilla y León, Nicanor Sen, quien ha sostenido que no tiene confirmación de que el siniestro se debiera a un exceso de velocidad pero sí lo ha vinculado al frente frío del fin de semana en Castilla y León, con precipitaciones muy importantes, unidas a una bajada de las temperaturas nocturnas.
Esas condiciones, que provocan la presencia de hielo en la calzada, pudieron haber producido el desplazamiento del autobús que chocó con el quitamiedos, según ha apuntado Sen.
El delegado del Gobierno ha reconocido que el accidente, ocurrido en el kilómetro 10,900 de la carretera LE-331, pudo haber sido "muy grave", aunque al final se quedó "exclusivamente solo en un susto".
Los alumnos tenían entre ocho y diez años y viajaban a la nieve dentro de las actividades extraescolares promovidas por la Diputación de Zamora y sufrieron el siniestro en el que el autobús quedó al borde de un talud que llegaba a las aguas del embalse.
El siniestro tuvo lugar sobre las 9.50 horas y los alumnos continuaron después camino en otro autobús y pasaron una jornada de actividades de nieve aunque en un lugar distinto al previsto inicialmente, ya que el puerto de San Isidro se encontraba cerrado y no pudieron acceder a la estación de esquí a la que iban.