Cerrar

I Congreso sobre Economía del Sur de León

Gay analiza la labor económica y social de la Iglesia en los pueblos "con la persona en el centro"

El vicario de la Diócesis de Astorga ha garantizado que "la presencia eclesial no va a terminar nunca. Haya más o menos personas, o más o menos posibilidades económicas, es una presencia permanente y sólida" para el medio rural

El vicario de la Diócesis de Astorga, Javier Gay, durante su intervención en el congreso sobre el Sur de León.RAMIRO

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

El vicario de la Diócesis de Astorga, Javier Gay, ha planteado en su intervención en el I Congreso sobre la Economía en el Sur de León un análisis de la labor económica real que realiza la Iglesia en el territorio rural así como la labor social y el papel de cohesión social que ejerce en los pueblos.

En concreto, Gay ha apuntado que la Diócesis de Astorga se mueve en el ámbito rural, con 162 trabajadores que son sacerdotes, 113 seglares y 125 proveedores con gastos superiores a los 3.000 euros, lo que supone "un movimiento económico relevante". En este punto, ha afirmado que actualmente "son más los seglares contratados por la Diócesis que los sacerdotes que están trabajando", para enfatizar la creación de empleo de la Diócesis a la que también se puede añadir la de las instituciones eclesiales. En concreto, ha señalado que en La Bañeza hay cuatro instituciones que generan por encima de los 150 contratos directos y que en Astorga, en total, se pueden contabilizar por encima de los 250 los trabajadores directos.

"La Iglesia es una empresa que genera empleo en el Sur de la provincia de León", ha aclarado el vicario de Astorga, que se ha referido a la labor en el sector servicios, pero también a la generación de riqueza por "la capacidad de atracción religiosa y turística en todo su entorno, con una relevancia indirecta para el territorio, una generación de economía que va más allá de lo directamente religioso".

Gay ha mencionado un estudio del año 2013 en el que se refleja que cada visitante a una catedral aporta 59 euros de media ya que  "no sólo emplea el dinero en pagar la entrada si no que gasta en otras cuestiones". "Si tenemos 80.000 visitantes en la catedral de Astorga, se transformaría en 4,7 millones de euros de impacto en la ciudad. Es una realidad eclesial que ayuda al dinamismo económico de una zona", ha matizado el vicario, que ha señalado que en el mencionado estudio, la generación de empleo se podría estimar que alcanzaría  104 empleos directos e indirectos, por el movimiento que genera patrimonio del nivel de una catedral o del Palacio Episcopal de Gaudí.

Además, ha apuntado que "el patrimonio cultural y religioso y adecuadamente cuidado y potenciado puede ayudar al turismo".

Por otra parte, ha analizado la labor social de la Iglesia para quien "lo que está en el centro no es la economía sino la persona". Así, Gay ha explicado que "la Iglesia está presente en el mundo rural no tanto porque genere economía, sino porque hay personas a las que queremos cuidar y servir religiosamente". "La presencia eclesial no va a terminar nunca, haya más o menos personas, o más o menos posibilidades económicas, es una presencia permanente y sólida", ha aclarado el vicario. Así, el hecho es que "cuanto otros actores económicos se retiran, la Iglesia está presente y puede seguir ayudando en todos los sentidos. La Iglesia no deja sin atender ningún pueblo".

Gay también se ha reflexionado sobre  la labor de cohesión social de la Iglesia, "a través de su labor humana y social, con los habitantes permanentes, que están cada día, y con los no permanentes". 

En concreto, ha explicado que con su presencia, "la Iglesia hace una labor religiosa y una labor caritativa y social, por lo que está pendiente de las personas en cualquier atención religiosa y cualquier atención humana que se pueda realizar". Por ello, ha matizado, "los sacerdotes son muy conocedores de primera mano de todas las dificultades y necesidades en los pueblos, como el transporte o la sanidad".

Gay ha destacado que también hay iniciativas de acompañamiento organizado, "con una atención más estable y más prevista" y ha avanzado que "estamos promoviendo centros de día y lugares donde los más mayores y que están solos tengan un sitio caliente, agradable y un sitio donde encontrarse, no solo para rezar, si no para estar acompañados". También se ha referido a la labor de los voluntarios de Cáritas, "que están pendientes de la gente que lo necesita". 

La labor de cohesión social también es "fundamental" con los habitantes vinculados o que no son permanentes, "y se sienten parte real de ese pueblo", según Javier Gay, ya que estas personas "están pendientes, por ejemplo, de cuestiones como las celebraciones religiosas, las fiestas o las romerías para acudir a su pueblo". También hay otras ocasiones "como las celebraciones familiares, como los bautizos, comuniones, bodas o funerales, que también se realizan en los pueblos porque allí es donde la familia se reúne".

“Estas personas también quieren cuidar de su iglesia, porque para ellos su iglesia es su pueblo”, ha añadido el vicario de Astorga, quien también se ha referido a las iniciativas culturales “ya que en casi todas ellas se cuenta con el sacerdote, por lo que se convierte en vínculo con quienes no están en el pueblo”.

Finalmente, ha reflexionado sobre el “valor de la palabra”, porque la Iglesia “da voz a quienes tienen menos voz y se sienten menos escuchados” y hace posible “que todo el mundo pueda escuchar que ahí también hay personas que son merecedoras de la atención” como los que viven en las ciudades.