Así se plantan los sueños

Rodeado de campos de secano, en una loma prácticamente improductiva, pero con unas vistas impresionantes, comenzó a surgir el milagro hace un par de años en la pequeña localidad de Fáfilas. El pedáneo y también alcalde del municipio de Villabraz, Ricardo Pellitero, soñó un día en hacer de ese montículo, bajo el que se esconden varias bodegas, un lugar de paz y descanso lleno de colores, los colores que iban a dar decenas de árboles de distintas variedades que con sus flores y hojas hicieran distinto el lugar según la época del año.

Y a fe que lo está consiguiendo ayudado por numerosos vecinos y amigos que vieron en el proyecto una forma de reivindicar la multitud de bellos espacios que hay en el medio rural.

Cada árbol ha sido plantado por una persona, entre las que se encuentran numerosos niños y también mayores. A todos se les exige un compromiso. Se les obliga a firmar un contrato en el que se comprometen, sino ya a cuidar su árbol, sí al menos a visitarlo de vez en cuando y avisar a la junta vecinal en el caso de que vean que tiene algún problema. Es una forma también de vacunarse contra el olvido.

Según señala el alcalde, «aprovechamos el dinero de los planes de la Diputación para las juntas vecinales para seguir repoblando la ladera».

Hace apenas unos días, en torno al Día del Árbol, un grupo de niños con sus monitores pertenecientes al Hogar Alba/Santa María y al Hogar Nuestra Señora de Lourdes de León se acercaron hasta Fáfilas para tener allí su propio árbol. Se lo pasaron en grande. Sus caras reflejaban la satisfacción de haber puesto con sus manos su árbol. Después disfrutaron de una merienda. Y lo agradecieron desde lo más hondo de su inocente corazón. Entregaron cada uno una cartulina dibujada por ellos mismos en las que las hojas de los árboles eran sus propias huellas dactilares. Y un cuadro conjunto en el que podía leerse «Muchas gracias por dejarnos plantar nuestros sueños».

Este mismo fin de semana se han continuado plantando más con algunos de los vecinos de mayor edad del pueblo.

Además se ha ido adecuando la zona, se han construido nuevos caminos y paseos, se ha dotado de riego a cada árbol... No se han hecho grandes inversiones en materia económica, sino que el proyecto está siendo posible gracias a la implicación y colaboración de todos.

No es necesario ser de Fáfilas para tener un árbol en la ladera. «Cada día nos llegan nuevas peticiones». Este año se han puesto unos treinta, pero desde que comenzó la iniciativa ya se han plantado más de cien. Todos ellos se comprometen a ir de vez cuando al pueblo a visitar a su árbol.

Además, el Ayuntamiento de Villabraz ha dado a cada una de sus tres pedanías —Villabraz, Alcuetas y Fáfilas— árboles y medios para poner en sus pueblos.