CHD esperará al final de la campaña de riego para acometer el vallado del canal de Arriola
Se ultima la redacción del proyecto con el que se quiere poner fin a la constante muerte de animales por ahogamiento
Las esperadas y demandadas obras para vallar las dos márgenes del canal de Arriola, y acabar así con esta peligrosa trampa mortal para los animales silvestres, especialmente para corzos y jabalíes, ya tienen los plazos para su ejecución.
Actualmente, la Confederación Hidrográfica del Duero está terminando la redacción del proyecto para completar el vallado en ambas márgenes para toda la zona problemática. El proyecto cuenta con un plazo de ejecución de seis meses y el inicio de las obras está previsto para este año 2024, cuando finalice la campaña de riesgo y disminuya el caudal del canal, de modo que los trabajos finalizarán, como muy tarde, en el primer semestre de 2025.
Hay que destacar que estos trabajos serán previsiblemente financiados parcialmente en el marco de un Convenio suscrito entre la Dirección General de Biodiversidad, Bosques y Desertificación y la Confederación Hidrográfica del Duero, para el desarrollo de actuaciones de reducción del riesgo de mortalidad de especies de fauna silvestre.
Esta actuación se suma a otras que ha desarrollado el Organismo en los últimos años, comprobándose que el vallado es la medida más efectiva en el canal de Arriola. En el año 2022 se procedió al vallado por su margen derecha del tramo comprendido entre el punto kilométrico 2,635 y el 4,600, y durante la segunda mitad del año 2023, se instaló malla cinegética a lo largo de tres kilómetros más, también en la margen derecha.
El proyecto inicial ha sufrido una importante modificación ya que finalmente no será necesario perimetrar toda la infraestructura, tal y como se había previsto en un primer momento, ya que el proyecto para de modernización de la zona regable del Canal de la Ribera Alta del Porma, ya licitado, dejará en desuso la mayor parte del canal de Arriola, concretamente 21 de los 32 kilómetros de longitud total.
De esta forma, tan solo quedarán en servicio los primeros kilómetros del canal, donde el problema de caída de animales quedará resuelto al completarse el vallado con este nuevo proyecto de la CHD, que cuenta con un presupuesto de 200.000 euros, unos 800.000 euros menos de lo estimado inicialmente, cuando se presupuesto esta ejecución en torno al millón de euros.
Hasta el momento, todas las actuaciones llevadas a cabo en el canal para frenar la muerte de animales no han resultado eficaces, según reconoce la propia CHD.
En 2016 se instaló una rampa flotante en el punto kilométrico 10 del canal que no ha conseguido resultado alguno. Por otro lado, Arriola presenta dificultades técnicas para la construcción de rampas laterales anexadas, por sus dimensiones y estructura, ya que se trata de un canal semicircular que lleva caudales elevados y, además, no se dispone de los terrenos necesarios para su construcción. Otro problema importante es la baja temperatura del agua, uno de los principales factores que afecta a la tasa de supervivencia, ya que, debido a la hipotermia, los animales no pueden nadar y llegar con vida a la salida. Por este motivo, desde que se ejecutó la rampa flotante, se tienen evidencias que demuestran que ningún animal la ha utilizado para salir del canal
Una trampa mortal para la fauna
Según datos de la propia Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), titular de esta infraestructura hidráulica, entre los meses de abril y junio del pasado 2023 han perecido en el canal —que tiene una longitud total de cerca de treinta kilómetros— cerca de cuarenta animales en los municipios de Valdefresno, Vegas del Condado y Santa Colomba del Curueño, cifra que se eleva a los 139 en las dos últimas temporadas de riego —la de 2022 y la 2023—, y que evidencia «el considerable aumento de muertes de corzos y jabalíes, mayormente, que caen al canal principalmente en los meses de primavera y verano», según consta en un informe de la propia confederación.
De todos modos, desde distintas asociaciones conservacionistas se apunta a la cantidad de animales que mueren en esta infraestructura es mucho mayor. De hecho son muchas las denuncias presentadas hasta la fecha, tanto por parte de los vecinos de la zona como por asociaciones conservacionistas para denunciar esta situación, que incluso ha motivado una resolución del Procurador del Común en la que exigen solucione tanto a la CHD, como responsable de la infraestructura, como la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, a la que responsabiliza de la superpoblación de especies como el jabalí el corzo principales víctimas de este canal, al que también caen perros, y otros animales