La Junta declara la emergencia cinegética para frenar al avance de la tuberculosis
También publica el nuevo Plan de Gestión de Jabalí para controlar el incremento poblacional y frenar sus daños
Editorial: El conflicto con la caza ya es sanitario
La Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de la Junta de Castilla y León ha publicado este jueves la orden por la que se declara la emergencia cinegética en 356 municipios de la comunidad, de los que siete se encuentran en la provincia leonesa, y que son Acebedo, Boca de Huérgano, Burón, Maraña, Oseja de Sajambre, Posada de Valdeón y Riaño.
De esta manera, la administración autonómica busca poner freno al avance de la tuberculosis, que en estas zonas alcanza ya una elevada prevalencia, lo que puede poner en peligro las cabañas ganaderas de montaña.
El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, informó de esta medida, prevista en la Ley de Caza de Castilla y León de 2021, que se completa con el nuevo Plan de gestión del Jabalí que recoge todas las modalidades de caza mayor.
La declaración de emergencia cinegética contempla que los titulares cinegéticos deberán informar quincenalmente sobre el número de las acciones de caza y sus resultados con la finalidad de evaluar los niveles de reducción de las poblaciones de las especies incluidas en la declaración de emergencia.
Adicionalmente, faculta a que en aquellos terrenos cinegéticos en los que se hayan agotado el número de cacerías colectivas contemplados por temporada o bien se haya completado el cupo de capturas autorizado, el titular cinegético pueda llevar a cabo controles poblacionales sometidos al régimen de comunicación, siempre que no concurran limitaciones normativas en materia de conservación del patrimonio natural y de la biodiversidad.
También se contemplan medidas de refuerzo como el aumento de las capturas mediante el incremento del número de perros o de cazadores en las cacerías colectivas que se vayan a realizar en la modalidad de gancho. Todo ello con el fin de eliminar la sobrepoblación de jabalí, ciervo y gamo en los municipios implicados.
En concreto, la declaración de emergencia cinegética afecta especialmente a las provincias de Salamanca y Ávila, donde el número de municipios incluidos en la Orden se eleva hasta 223, en el caso del territorio salmantino, y a 106 en relación a la provincia abulense. También se incluyen siete pueblos de León, nueve de la provincia de Palencia y otros 13 de territorio segoviano.
Por otra parte, el Plan de Gestión del Jabalí en Castilla y León incide en la necesidad del mantenimiento de los niveles de las poblaciones de esta especie, que señaló ha crecido porque se les puede ver en zonas urbanas, como en León. Las medidas previstas, dijo, pasan por incorporar todas las modalidades de caza mayor, así como que se contabilice toda la superficie del coto para determinar el número de cacerías, incluyendo las áreas agrícolas. También se elimina la superficie mínima para autorizar estas batidas o la prohibición de repetir estas acciones en una zona, además de otras acciones como el cebado previo, el fototrampeo o el manejo de perros.
El consejero de Medio Ambiente dudó de que el lobo pueda ayudar a controlar la población de jabalís, como apunta un estudio de CSIC y la Universidad de Valladolid (UVa), y apuntó que desde 2021 se ha incrementado el número de estos cánidos, con más de 2.000 en la actualidad en la Comunidad frente a los 500 de hace 35 o 40 años, sin que eso haya supuesto una reducción del número de jabalís.
Finalmente, el consejero señaló que la Junta está elaborando un censo de lobos, en coordinación con otras comunidades limítrofes, para determinar su población, pero recalcó que acabó con 5.000 cabezas de ganado en 2023 y añadió que los ataques desde 2021, cuando fue incorporado como especie protegida en todo el país, han crecido un 30 por ciento. Todo ello, señaló, ha llevado a la Comisión Europea a plantear una modificación de lo recogido en el Convenio de Berna para adoptar la propuesta que plantea la Junta mediante el control cinegético.
Curso internacional sobre los daños del lobo
El director general de Medio Natural de la Junta de Castilla y León, José Ángel Arranz, ha clausurado este jueves el Curso Europeo sobre Fauna silvestre: manejo, exploración e investigación forense , celebrado entre las ciudades de Zamora y León en la Facultad de Veterinaria de la Universidad de León (ULE).
«Nuestra gestión con el lobo ha quedado reducida al pago de daños, que en los últimos tiempos se están incrementando, por eso es tan importante la formación de nuestro personal, que tiene la difícil tarea de evitar el fraude», aseguró Arranz. El director general ha agradecido a los organizadores la colaboración para impulsar este tipo de jornadas «que son de máximo interés para nosotros porque además de las universidades, participan empresas del sector privado y también profesionales veterinarios, lo que hace que abordemos una mejora en la formación para la gestión del lobo».
Arranz ha señalado que la profesionalización requiere de una capacitación y una experiencia que «gracias a este curso se logra compatibilizar entre el mundo académico y el de los gestores ambientales». Una profesionalización que —según ha explicado Arranz— es vital para afrontar «una labor compleja como es la indemnización de los daños causados por el lobo en ganaderías. Ahora mismo tenemos dificultades para gestionar el lobo por las limitaciones legales, de ahí que nos centremos en la indemnización y en la peritación de daños. Hemos comprobado que cuando formamos al personal que va a atender a un ganadero, si ve que es un profesional formado, rebaja la situación de tensión en esa peritación».
Este curso, organizado a través de la colaboración entre la ULE, la Junta de Castilla y León, la Fundación Patrimonio Natural de Castilla y León y la Sociedad Euromediterranea de Vigilancia de Animales Salvajes (WAVES) y coordinado desde Ilex Consultora Ambiental, ha implicado durante tres días a más de 60 asistentes de Italia, Portugal, Croacia, Eslovaquia y España. Entre ellos ha destacado un grupo de 14 participantes italianos que están realizando el Máster en la Universidad Federico II de Nápoles (Italia), y un grupo de más de 35 agentes medioambientales y celadores de la Junta de Castilla y León, procedentes de todas las provincias de la Comunidad.
El programa formativo se inició con una jornada sobre biología, manejo y gestión del lobo en el Centro del Lobo Ibérico de Castilla y León «Félix Rodríguez de la Fuente», donde los asistentes participaron en prácticas presenciales sobre el ciclo biológico y la reproducción del lobo ibérico, la historia, costumbres y tradiciones del lobo, la atención veterinaria del lobo en semilibertad, así como conferencias sobre la gestión de esta especie en Castilla y León y la proyección de un documental sobre la captura, seguimiento y control sanitario del lobo ibérico.
La segunda jornada, se dedicó al manejo, exploración y diagnóstico en enfermedades en aves silvestres en las instalaciones del Hospital Clínico Veterinario de la Universidad de León. El programa se ha completado con sesiones teórico-prácticas de investigación forense en animales domésticos y silvestres depredados por grandes carnívoros y con la presentación del documento Peritación de ataques de lobo a la ganadería: protocolo para su inspección de Perfecto Reguera Acevedo, Vicente González Eguren, profesores de la ULE, y Tomás Yanes García, asesor de ILex. Destacando la importancia de la colaboración internacional en la conservación de la fauna, el workshop final reunió a expertos de España, Portugal, Croacia, Eslovaquia e Italia para discutir estrategias de identificación de siniestros y su aplicación en la peritación en campo.