Cerrar

El récord de reservas y la escasa demanda convierten en excepcional el año en el Luna

La serie histórica de la última década refleja campañas críticas como la de 2017 donde en estas fechas ya estaba al 50%

Imagen del pantano de Barrios de Luna hace unas semanas, prácticamente lleno. RAMIRO

León

Creado:

Actualizado:

El récord de reservas y la escasa demanda convierten la campaña de riego en el Sistema Órbigo en un año excepcional. Prácticamente nunca, en los últimos diez años, el embalse de Barrios de Luna había tenido tanta agua por estas fechas y había gastado menos.

Las causas de esta rareza radican en la meteorología de los últimos meses que hizo que tanto el Luna como el resto de pantanos de la provincia llegasen al inicio de campaña de riego con sus reservas prácticamente a tope. Si a esto se añaden las lluvias de las últimas semanas y días que han hecho que apenas se haya necesitado regar y lo poco que se ha hecho haya sido utilizando el agua del río sin prácticamente tener que desembalsar, el resultado es que a 21 de junio el embalse esté al 96,8% de su capacidad con 298,3 hectómetros cúbicos. Incluso, en la última semana ha recuperado casi un hectómetro —según los datos que CHD publica en su página web— cuando lo habitual es que por estas fechas hubiese gastado varios. En realidad se han consumido apenas 35,22 hectómetros pero sin mermar las reservas del embalse ya que, como se ha señalado, se han cogido del agua que baja por el río.

Estas cifras no son lo habitual sino algo absolutamente excepcional, aunque ha habido otros años que también pueden considerarse buenos. Según los datos facilitados por el Sindicato Central del Embalse de Barrios de Luna, las campañas más parecidas a ésta son la de 2018 cuando el embalse tenía 298,30 hectómetros, pero ya se había consumido prácticamente 49; ó la de 2016 cuando había en el pantano 295,58 y apenas se habían utilizado para el riego 36,61.

En el lado opuesto está el año 2017 cuando a 21 de junio ya se habían 60,77 hectómetros y en el embalse apenas quedaban 155, el 50% de su capacidad. Ese fue un año durísimo en el que hubo que poner estrictas restricciones que provocó que se perdieran algunas cosechas y otras vieran mermada su producción ante la escasez de agua. Incluso aquella situación se llevó por delante al histórico Ramón Ferrero que dejó su cargo al frente de la Comunidad de Regantes del Canal del Páramo (Páramo Alto).

Otro dato que llama la atención en la serie histórica de la última década es el consumo que ya se había producido en estas fechas llegando a los 105 hectómetros, muy por encima (prácticamente el doble) del resto de campañas. En 2014 y 2015 la demanda también superó los 70 hectómetros, aunque lo habitual es que en una campaña normal se sitúe entre 45 y 60.

Desde el Sindicato Central de Barrios de Luna no se cansan de repetir que los datos de esta campaña son absolutamente excepcional en los que aúnan un pantano lleno con las lluvias de este mes de junio que han hecho que casi no se haya necesitado regar. E insisten en que se esforzarán, como siempre, en ahorrar la mayor cantidad de agua posible para que quede en reserva para el próximo año. Hay que recordar que el embalse de Barrios de Luna tiene que llenarse cada campaña para poder satisfacer la demanda de la 56.000 hectáreas de regadío que tiene asignadas.

Por ello continúan reclamando una mayor regulación que permita almacenar más agua para los años de sequía que según todos los expertos climáticos serán cada vez más habituales.

La situación de bonanza que vive este año el Sistema Órbigo puede, con sus diferencias y peculiaridades, extraporlarse al resto de pantanos de la provincia que en su conjunto están al 91,5% de su capacidad. Riaño cuenta con 578,60 hectómetros cúbicos de agua embalsada (90.2%), Porma con 282,7 hectómetros (89,0%) y Villameca con 18,2 hectómetros (91,1%).

En el conjunto de la provincia, los embalses de la Cuenca del Duero han disminuido sus reservas un 11,2% en la última semana, cifras inferiores a lo habitual para estas fechas. El volumen total de agua embalsada es de 1.177 hectómetros, por los 941 del año pasado y los 1.050 de media en la última década.