Boñar clama contra CHD por no dejar soltar agua del Porma para actividades de rafting
El alcalde recuerda que se trata de un turismo de montaña que atrae más de 4.000 visitantes y genera 10 empleos
Editorial: Todas las rentabilidades que permite la abundancia de agua
Boñar clama contra la CHD por no dejar soltar agua del pantano del Porma para uso turístico, concretamente para un deporte como el rafting, más allá de cuando es necesaria para el riego aguas abajo. Y más, en un año como el actual en el que el pantano está prácticamente lleno.
El alcalde de Boñar, Pepe Villa, recuerda que los datos lo dejan bien claro: embalses 10 puntos por encima de la media y rondando el 90% de su capacidad, pero según todas las administraciones implicadas no se puede emplear ni una gota de esa agua para apoyar el turismo en la montaña leonesa. «Así de claro lo dejan los responsables de los embalses de la Confederación Hidrográfica del Duero que afirman que se deben exclusivamente a sus regantes mientras las empresas de turismo acuático asentadas en Boñar se ven abocadas a cancelar un fin de semana tras otro decenas de reservas ante la negativa de incluir el uso recreativo del agua del Porma».
El rafting en el Porma está considerado como el mejor de su género fuera de la franja pirenaica y acosada por el calor tiene en Boñar el centro perfecto para desarrollar una actividad refrescante y sostenible en alza en todas partes del mundo que tienen el privilegio de poder desarrollarla.
En la actualidad el rafting del Porma da vida a dos empresas que generan 10 puestos de trabajo directos y, en conjunto, atraen más de 4.000 visitantes a Boñar cada temporada, con un perfil tipo de turista atraído por la naturaleza y los valores culturales de la zona. Además es un turismo de calidad que se complementa perfectamente con el resto de oferta turística de la montaña leonesa.
Sin embargo, la actividad solo puede desarrollarse si hay demanda de agua para riego en la zona sur de la Comunidad, «con independencia de la gran disponibilidad de agua acumulada en el embalse del Porma y de la repercusión de la actividad en la economía del valle», según Villa. Esto restringe la temporada a unas pocas semanas, a pesar de que hay demanda de la actividad en otros momentos del año. Se trata de un recurso turístico de primer nivel que «se malogra por un bloqueo directo y reiterado de las administraciones. Es la propia Confederación Hidrográfica del Duero la que niega un año tras otro la posibilidad de que el recurso agua tenga un aprovechamiento recreativo que insuflaría vida a la economía del valle».
Villa precisa que no se está pidiendo dinero solo derecho a usar un recurso local a nivel local, en un valle que vio inundarse 9 pueblos para un desarrollo económico que nunca se queda en la zona. Esta postura de la CHD contrasta enormemente con lo que ocurre en otros lugares de la Península en los que las empresas de turismo activo tienen derecho respaldado por la Administración a disponer de agua para el desarrollo de su actividad.
Con el mismo volumen de agua empleado en dos días durante la campaña de riego se lograría alargar la temporada de rafting en Boñar un mes, y en años como éste, poder garantizar la actividad durante los fines de semana.
Esto supondría incrementar el volumen de la actividad (es decir, de turistas en la zona) un 35% anual. Sin inversiones, solo firmando un papel. Con la situación actual las empresas leonesas llevan cancelando reservas acercándolas un poco más al abismo del cierre definitivo.