Tratan de demostrar que la joven del parto en Coyanza sería inimputable
Los psiquiatras de la muchacha ponen sobre la mesa la figura del ‘embarazo críptico’
La familia de la joven encarcelada y puesta en libertad recientemente por su protagonismo en un parto clandestino que tuvo lugar en Valencia de don Juan pretende demostrar que la muchacha fue víctima de un embarazo críptico, que resumidamente consiste en reaccionar con una negación absoluta al hecho de haberse quedado embarazada sin haberlo deseado, con la posibilidad que se plantea en estos casos de llegar, incluso a no ser consciente de que se está en estado de gestación y de que el proceso termina con un parto que también se niega.
De conseguir probar este extremo, la joven sería declarada inimputable y eludiría la responsabilidad penal que se le puede plantear en la causa judicial, que probablemente se abrirá contra ella en la que el Ministerio Fiscal habla de la posibilidad de que incluso se pueda tratar el episodio como un asesinato, circunstancia que comportaría una pena de prisión de alrededor de 20 años.
La joven permanece ajena a los ojos del resto de la sociedad una vez que la semana pasada recuperó la libertad, aunque solamente sea de forma provisional. La Audiencia Provincial determinó que se le retirase el pasaporte y de forma periódica tiene que presentarse en sede judicial para dar cuenta de su presencia en la provincia y estar controlada en sus movimientos.
De alcanzar esta convicción a nivel jurídico, el letrado que defiende los intereses de la familia podría solicitar que se conmute la posible pena a la que se expone por la opción de someterse a un tratamiento de carácter médico y psicológico para resolver los problemas que plantea esta cuestión, que mantuvo en vilo a la opinión pública durante buena parte del mes de junio, vista de la trascendencia que alcanzó el asunto entre la población.
Los hechos ocurrieron a finales de mayo del presente año. La muchacha se presentó en el Complejo Asistencial Universitario de León, víctima de una fuerte hemorragia genital, que los médicos que la atendieron, en un primer momento, inmediatamente atribuyeron a la existencia de un parto en condiciones no habituales.
La madre negó este extremo y señaló que no tenía constancia de haber estado embarazada ni de haber sido protagonista de ningún parto. El asunto se puso en manos de la Policía Nacional que por corresponder la comarca de Coyanza a la jurisdicción de la Guardia Civil se traspasó a competencia de la benemérita.
Los agentes se desplazaron hacia el domicilio de la sospechosa, en cuya habitación encontraron el cuerpo de un bebé metido en un armario. Los primeros resultados de la autopsia depararon la certeza de que la bebé había nacido viva y de que había perdido la vida por la carencia de un tratamiento adecuado y de los auxilios correspondientes para estos casos. Se determinó entonces la necesidad de emprender acciones contra la muchacha.
Estando hospitalizada la joven en León, se dispuso un operativo de seguridad para evitar su fuga y se la mantuvo bajo vigilancia, policial y sanitaria, puesto que en varias oportunidades verbalizó su interés por quitarse la vida y su intención de hacerlo en cuanto fuese factible.
Puesta a disposición judicial y después de un terrible interrogatorio en el juzgado de Instrucción 4 de León que asumió el trámite ante la ausencia de la titular de instrucción 3, competente en la materia, se determinó su ingreso de prisión, que quedó sin efecto apenas un par de semanas después, cuando un recurso presentado por la familia y elevado a la Sección tercera de la audiencia Provincial, sirvió para que la madre de la criatura fallecida diese cuenta de sus primeros días en libertad.
¿Qué es un embarazo críptico?
El embarazo críptico o negación del embarazo es un fenómeno que ocurre, según varios estudios, cuando la mujer y su entorno desconocen el estado gestacional hasta una instancia avanzada del embarazo o, incluso, hasta el momento del parto.
En muchos casos, en los que el embarazo no es bien recibido, esta situación puede suponer una crisis para la mujer que genere una situación de estrés tal que le lleve a negar la situación.
En algunas circunstancias se han dado casos de infanticidio y neonaticido (asesinato del recién nacido dentro de las primeras 24 horas tras el parto).