Hito histórico en una Tierra marcada por la despoblación
Villalmán celebra su primer bautizo
Tras más de un cuarto de siglo sin recibir ningún niño, el último fue en 2000, la llegada de Adrián Parra Ferchoso ha hecho que la localidad se una para conmemorar el significativo bautismo
Los vecinos de Villalmán, una localidad que ha visto disminuir su población con el paso de los años hasta registrar en la actualidad un total de tres habitantes empadronados según datos del INE.
Se unieron para la celebración del bautizo de Adrián. Desde primeras horas de la mañana, hasta que el diácono Felipe recibió a los padres y padrinos del pequeño en la puerta del templo, el repique de las campanas anunció el evento.
Este bautizo es especialmente significativo para la localidad, puesto que marca el fin de un periodo de un cuarto de siglo sin bautizos en la localidad. El último bautizo registrado en el viejo libro de la parroquia fue en el año 2000. La llegada de Adrián a este registro es un evento que se recordará en la vida de Villalmán.
Además, el hecho de inscribir a Adrián en el mismo registro donde figura su bisabuelo paterno, ha sido una circunstancia que la familia celebra con especial emoción.
Durante la ceremonia, el pequeño Adrián recibió los óleos y el agua bendita en un ambiente de solemne silencio. Con sonrisas y balbuceos, el bautizado mostró su curiosidad por todo lo que sucedía a su alrededor. La celebración estuvo armonizada por un grupo de jovencitas que ofrecieron lo mejor de su repertorio musical para Adrián.
Al final de la ceremonia, en presencia de vecinos, amigos y el diácono oficiante, se acercó al pequeño a la imagen de la Virgen, donde la vecina de mayor edad de la localidad entonó el cántico a la Virgen de Fátima.
Tras la ceremonia, vecinos y familiares se reunieron en el centro social para compartir un vino español acompañado de la mejor gastronomía de la zona antes de retirarse al hogar de los abuelos, Carmen y Alberto, donde disfrutaron de una buena comida en compañía.