Las formaciones geológicas del Esla entran en la lista de Patrimonio Geológico Mundial
Junto a otros cuatro enclaves de la península se incorpora a esta prestigiosa red compuesta de cien lugares de 40 países
Editorial: La nueva joya de la corona de León
Un nuevo enclave de León forma parte ya de los Sitios del Patrimonio Geológico Mundial por considerarse fundamentales para entender la historia de la Tierra
El manto de Esla, junto a las ormaciones geológicas de Monte Perdido (Huesca), Aliaga (Teruel) y Las Hoyas (Cuenca) se han sumado a esta prestigiosa lista mundial formada por cien enclaves en más de 40 países.
El anuncio se ha realizado durante el 37 Congreso Geológico Internacional (CGI) que se celebra esta semana en Busan (República de Corea), y es fruto del análisis de las 212 candidaturas presentadas, entre las que han participado más de 700 especialistas de 80 países y 16 organizaciones internacionales.
El Instituto Geológico y Minero de España (IGME-CSIC), con sus investigadores Gonzalo Lozano, Luis Carcavilla, Enrique Díaz y Juana Vegas, ha sido colíder de este proyecto internacional al ser pionero a nivel mundial en la realización de inventarios geológicos, informa el CSIC en un comunicado.
Reconociendo el Manto tectónico de la Unidad del Esla, los expertos alaban este «excepcional laboratorio natural para el estudio de la evolución de los cinturones de pliegues y cabalgamientos» con un registro geológico casi completo del Paleozoico, que comienza en los estratos del Cámbrico Inferior y termina en el Carbonífero Superior.
El manto afecta a una sucesión de tres mil metros de espesor con varias láminas que se desplazaron más de 90 kilómetros hacia el noreste, emplazándose sobre rocas más modernas hace aproximadamente 310 millones de años.
En el caso del yacimiento paleontológico del Cretácico Inferior de Las Hoyas (Cuenca), los geólogos han considerado que se trata de un ejemplo único al preservar de manera excepcional el ecosistema de un humedal en un clima subtropical de inicios del Cretácico (hace 127 millones de años).
El yacimiento contiene fósiles de unas 250 de especies de organismos de cuerpo blando, plantas y animales, que son de las primeras evidencias evolutivas cruciales de semillas y flores, de los modernos aparatos voladores de aves y de la complejidad del pelo y la presencia de pulmones en mamíferos.
Muchos de sus fósiles, que van desde algas hasta dinosaurios, se hayan expuestos en el Museo Paleontológico de Castilla-La Mancha en Cuenca.
Las Estructuras tectónicas del macizo de Monte Perdido (Huesca) son declaradas Sitio del Patrimonio Geológico Mundial por ser una referencia mundial para comprender las relaciones entre erosión, sedimentación y deformación en los procesos de construcción de montañas en general, y de los Pirineos en particular.
Este espectacular apilamiento de estructuras tectónicas, responsables de la elevación del macizo calcáreo más alto de Europa occidental, está al descubierto tras la erosión glaciar, con un registro que abarca 35 millones de años en una única sucesión de más de 1.500 metros de espesor.
El espacio es uno de los pocos lugares del mundo que posee los tres títulos que otorga la Unesco: Patrimonio de la Humanidad, Reserva de la Biosfera y Geoparque Mundial.
Los pliegues alpinos superpuestos en Aliaga (Teruel), también reconocidos, constituyen el mayor y más original ejemplo de plegamiento de la corteza terrestre, resultado de la superposición de dos sistemas de direcciones norte-sur y este-oeste respectivamente, que generan un espectacular paisaje modulado por la erosión.
La zona es muy visitada por estudiantes de geología de Europa, sus pliegues se estudian en manuales de todo el mundo y está incluido en el Parque Geológico de Aliaga y en el Geoparque Mundial de la Unesco Maestrazgo; siendo, además, el lugar donde nació Geolodía, la iniciativa de divulgación de la ciencia más popular en España.
Entre los restantes 96 sitios elegidos en todo el mundo están algunos tan emblemáticos como el volcán Vesubio (Italia), el glaciar Mer de Glace (Francia), el salar Uyuni (Bolivia), los yacimientos de Ischigualasto (Argentina), el Cañón del Colca (Perú) o el cráter del Ngorongoro (Tanzania).
Los nuevos lugares se suman a otros 100 escogidos por el Congreso Geológico Internacional en 2002, entre los que se encontraron otros tres sitios españoles: la Caldera de Taburiente (La Palma), el Flysch de Zumaia (Vizcaya) y las mineralizaciones de mercurio de Almadén (Ciudad Real).
Tres más
Localización
En general, toda la Región del Manto del Esla resume de un modo muy ilustrativo el conjunto de procesos tectónicos que han acontecido a lo largo de toda la Zona Cantábrica y que han dado lugar al emplazamiento de sus diferentes unidades estructurales y a sus estructuras deformativas características.
Según explica el Instituto Geológico y Minero de España (IGME), este enclave, declarado anteriormente Lugar de Interés Geológico (LIG) permite reconocer las relaciones existentes entre dos láminas estructurales de esta región, el Manto de Corniero y el Manto del Esla, situándose la segunda sobre la primera mediante un cabalgamiento que puede ser reconocido con facilidad a lo largo de varios kilómetros, de tal forma que el bloque cabalgante y el cabalgado guardan un llamativo paralelismo a lo largo de dicho cabalgamiento. Además, las rocas asociadas al plano de cabalgamiento (cataclasitas y rocas con desarrollo de cierta esquistosidad), son muy accesibles en este LIG.
La Región del Manto del Esla se sitúa al sur de la Zona Cantábrica y cuenta con unas características estructurales propias y muy singulares; hacia el este está delimitada por el Domo de Valsurvio, hacia el oeste por la Falla del Porma, hacia el norte por la Falla de León y hacia el sur por los materiales mesozoicos, paleogénicos y neogénicos de la Cuenca del Duero. Está dividida en dos sectores: uno occidental, de carácter preorogénico, en el que aflora una completa sucesión paleozoica, y otro oriental, constituido por materiales depositados durante la fase sinorogénica.
Peña Rionda es una importante elevación topográfica situada entre las localidades de Ocejo de la Peña, Aleje, Verdiago, Villayandre, Crémenes y Argovejo. Dado que se sitúa en el límite entre estos dos sectores, desde su cima se puede obtener una fabulosa panorámica de ambos, así como una visión general de la estructura de la Región del Manto del Esla y de su posición en el contexto de la Zona Cantábrica.