La Junta invierte 125.000 euros en la reparación de la cubierta de la zona administrativa de la Ferrería de San Blas
En próximos días se iniciará el proceso de documentación e intervención arqueológica de los hornos altos de la ferrería
Ferrería de San Blas en Sabero.
La Junta de Castilla y León invirtió 125.000 euros en la reparación de la cubierta de la zona administrativa de la Ferrería de San Blas de Sabero (León), a través del Servicio de Conservación y Restauración de la Dirección General de Patrimonio de la Consejería de Cultura.
La intervención consistió en reparar ese tejado, de 320 metros cuadrados, mediante un tramado estructural de madera que se encuentra ejecutado en su totalidad con una misma escuadría y que con el tiempo había sufrido un desajuste y deformación. El objetivo es preservar la actual cubierta introduciendo elementos que la refuercen para que sea más estable gracias a los refuerzos y reparaciones de algunos de los nudos dañados.
Además, en los próximos días se iniciará el proceso de documentación e intervención arqueológica en el área del complejo industrial de los hornos altos de la ferrería, donde se conservan elementos aéreos y otros que están ocultos bajo tierra. Con ello se pretende conocer, de forma más detallada, el proceso histórico e industrial de esta instalación y el contrato se ha adjudicado a la Unión Temporal de Empresas Ferrería de San Blas por 286.877 euros.
La Ferrería de San Blas es una muestra de una singular arquitectura neogótica, de una primera industria siderúrgica y de los adelantos técnicos de la época. Fue la primera ferrería en emplear altos hornos alimentados con carbón mineral en España, así como en traer las maquinarías que estaban revolucionando Europa.
La fábrica está formada por una gran nave central diáfana construida en piedra y ladrillo a partir de 1846 por iniciativa de la Sociedad Palentino-Leonesa de Minas. Su cubierta está sustentada por una sucesión de arcos de diafragma. Tiene una planta basilical de tres naves, siendo la central más elevada y ancha que las naves laterales, que se comunican con la central por medio de arcos apuntados. Ambas naves se prolongan en la zona oeste formando cobertizos y se abrían al exterior por medio de arcos de medio punto que conformaban una espléndida galería.