Enfrentamiento entre el PP y el PSOE en el último pleno de Mansilla de las Mulas
Ayuntamiento de Mansilla de las Mulas. RAMIRO
La respuesta de la alcaldesa de Mansilla de las Mulas, Camino Lozano, a la denuncia del PSOE por el «caos y los incidentes» registrados en el último pleno, no se ha hecho esperar.
El PSOE acusa a la regidora de permitir las agresiones verbales por parte de una persona del público a Pablo Pérez Rubio, el concejal que recientemente se ha pasado al grupo y abandonó el equipo de gobierno del PP para formar una coalición con el PSOE y la UPL. Afirman que durante el pleno, el concejal fue acusado de «transfuguismo y de filtrar información».
En una nota enviada ayer, el PP de Mansilla de las Mulas condena todo tipo de violencia, «ya sea física y verbal», y sobre todo condena la «maniobra orquestada días previos al pleno del pasado jueves por parte de Pablo Pérez Rubio, el cual en un grupo de whatsapp invitaba a la movilización de la población de la Urbanización Mansilla del Esla e insistía en que acudieran al pleno para que se pusieran en contra de la Alcaldesa», relatan.
Según la nota, al finalizar el pleno «los votantes del PP reclamaban una explicación a la traición que Pérez Rubio les había hecho, manteniendo reuniones desde hacía tiempo con la oposición, traicionando la confianza de quienes le habían votado en las pasadas elecciones».
«Ha sido un concejal ausente y traidor que ahora se sienta al lado de quienes quieren que las puertas de la urbanización permanezcan abiertas 24 horas», afirman, mientras que defienden que desde que se le nombrar en julio de 2023 concejal Delegado de Recursos Humanos, Formación y Empleo, «no ha mantenido ni una sola reunión con los trabajadores del ayuntamiento, ni ha informado sobre os que han finalizado su contrato laboral». Lozano afirma que «el PSOE miente al decir que la alcaldesa se mantuvo impasible», ya que defiende que intervino continuamente instando al orden y llamando al vigilante municipal para que interviniera. «Quizás los concejales del PSOE no se dieron cuenta porque también ellos estaban alzando la voz e insultando a la madre de un concejal PP de la pasada legislatura que no estaba presente», lamenta.
Lozano admite que «es verdad que los ánimos estaban muy caldeados por parte de los presentes, tanto los que se sentían traicionados como por los que acompañaron a Pérez Rubio, que también profirieron graves insultos a quienes le reclamaban que dejara el acta de concejal».
La alcaldesa se reserva el derecho que le asiste legalmente de interponer querella criminal contra aquellas personas que en repetidas ocasiones vierten acusaciones públicas menoscabando su imagen.