‘Kirk’ dejó entradas de hasta 200 m2 por segundo en los embalses leoneses
El paso de la borrasca provoca crecidas en los ríos Besandino, Omaña, Porma, Yuso, Cea y Esla
La Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) mantiene una especial vigilancia sobre los ríos de la cuenca ante el incremento de caudales registrado a consecuencia de las lluvias provocadas por el paso de la borrasca ‘Kirk’ en la Comunidad.
Las precipitaciones de las últimas horas han provocado un aumento de caudales en buena parte del tercio Norte -Noroeste de la cuenca con acumulaciones en zonas de cabecera que han llegado a los 80 litros por metro cuadrado. Ante esta situación, se han superado los umbrales de aviso en distintos puntos de control de los ríos Cardaño, Carrión, Pisuerga, Besande, Resoba, Rivera, Castillería, Monderío y Rubagón, en la provincia de Palencia, así como en distintos tramos de los ríos Besandino, Omaña, Porma, Yuso, Cea y Esla, en la provincia de León; junto al Tera, en la provincia de Zamora.
La previsión es que las crecidas generadas disminuyan y desde la CHD también se resalta que durante el episodio de avenidas ha resultado fundamental el efecto de los embalses de Compuerto y Camporredondo para laminar la avenida del río Carrión, con caudales punta de entrada en cabecera que superaron los 200 metros cúbicos por segundo; del embalse de Riaño en el río Esla, con caudales punta de entrada superiores a los 360 metros cúbicos; del embalse de Porma en el río homónimo, con caudales punta de entrada superiores a los 120 metros cúbicos; o del embalse de Barrios de Luna en el Órbigo, con caudales punta de entrada superiores a 95 metros cúbicos.
Asimismo, otro de los casos relevantes es el del embalse de Cervera-Ruesga, donde el caudal punta de entrada alcanzó los 63 metros cúbicos o el del embalse de La Requejada, donde ésta fue de 84 metros cúbicos. Estas avenidas fueron laminadas por completo por los embalses indicados, evitándose de este modo perjuicios y daños aguas abajo de los mismos.
Además, desde la CHD se informa que los efectos de estas abundantes precipitaciones, se están plasmando en el inicio en la senda de recuperación de las reservas en los embalses del norte de la cuenca. En concreto, las aportaciones han crecido de forma sustancial en el caso de los embalses de los sistemas Tuerto (Villameca), Órbigo (Barrios de Luna), Carrión (Compuerto y Camporredondo) y Pisuerga (Cervera, Requejada y Aguilar). En el global de la cuenca, las reservas alcanzan los 1.393,1 hectómetros cúbicos, habiendo aumentado en 48,6 hectómetros en la última semana.