CHMS sanciona a una pizarrera por vertidos incontrolados en el río Cabrera
Otras cuatro empresas han sido expedientadas y son investigadas por contaminar el río
Las múltiples denuncias interpuestas por la asociación ecologistas Cabrera Natural por los vertidos que de manera casi habitual se depositan en el río Cabrera van surtiendo efecto.
Durante los años 2021 y 2022, la Confederación Hidrográfica del Miño Sil ha tenido constancia de seis denuncias interpuestas por esta asociación en relación con el estado del río Cabrera. Estas denuncias, según han confirmado fuentes del organismo de la cuenca, han dado lugar a cuatro expedientes de investigación, de los que solo uno derivó en un expediente sancionador por encontrarse al causante de la infracción. Las cuatro denuncias avisaban de vertidos procedentes de explotaciones pizarreras, dando lugar a dos expedientes de investigación.
Por su parte, la asociación Cabrera Natural afirma que son once las denuncias interpuestas por esta situación desde el año 2021 hasta la actualidad, la última de ellas formalizada a finales del pasado mes de septiembre.
En ella ponían una vez de manifiesto la elevada turbieza con la que discurrían las aguas del río Cabrera, y que era especialmente evidente a su paso por la localidad de Robledo de Losada.
La asociación conservacionista aseguraba que «estos sólidos suspendidos se van depositando y sedimentando en el lecho del río Cabrera, generando una negra capa de finos que colmata el sustrato en su práctica totalidad, destruyendo o alterando fuertemente el hábitat bentónico en muchos kilómetros del curso fluvial aguas debajo de los puntos de vertido».
Grave perjuicio a la trucha
Estos últimos vertidos son «especialmente graves», según Cabera Natural, al poner en «serio peligro» la temporada de freza (puesta de huevas) de la trucha común, que comenzará en unas pocas semanas y que precisa de unos fondos de río limpios y libres de sedimentos.
Tanto desde esta asociación como por parte de los vecinos de la zona exigen una solución inmediata a este problema y la solución depure responsabilidades entre los responsables de los vertidos para hacer compatible la actividad pizarrera, uno de los recursos económicos más importantes de esta zona, con la preservación de los recursos naturales.