«La tecnología permite manejar mejor el coche pero con más averías»

-¿Desde hace cuánto tiempo ejerce esta profesión? -Desde hace 31 años. Empecé a los 14 años a trabajar en este taller porque no se me daban bien los estudios. En aquellos tiempos te buscaban un trabajo para aprender un oficio, unos en la mina y a mí me tocó venir aquí. -¿Le resultó difícil aprender el oficio? -No, con el paso del tiempo todo se va quedando. Cada día se aprende una cosa nueva porque la mecánica del automóvil es diferente a la de hace una década, lo que implica que tengas que estar al día en los avances que se producen en el sector. -¿Qué reparaciones mecánicas realiza habitualmente en el taller? -Además de tener la representación oficial en Laciana de Peugeot, realizamos reparaciones de mecánica en general y algo de chapa. Lo que más solemos hacer es revisiones de ITV y cambios de amortiguadores, aceite, frenos, dirección y otros accesorios. -Tal y como ha evolucionado el mercado laboral, ¿se puede subsistir siendo un mecánico por cuenta propia o es mejor estar ligado a una marca? -Como mejor se lleva es estando con una marca en concreto porque te puedes especializar en ella. En cambio si el taller repara todo tipo de coches, hay marcas que son más difíciles de arreglar porque no tienen la herramienta adecuada, aunque la suspensión, frenos y ruedas son prácticamente iguales en todos, lo que varía es la electrónica. -La vida de un coche en la actualidad, ¿es más longeva que la de los de hace 30 años? -Depende del cuidado que le dé el propietario. Además ahora prácticamente se hace mantenimiento y no reparaciones. En la actualidad los amortiguadores de los coches duran más tiempo porque las carreteras están en mejor estado y por consiguiente los frenos se usan menos. -¿El Plan Renove anima a los conductores a cambiar el coche? -Generalmente suelen cambiar por otras circunstancias, aunque para algunas personas el Plan Renove es un aliciente más. Muchos conductores en el año 2001 se animaron a cambiar el coche por el cambio de la peseta al euro. En cambio el pasado año el volumen de ventas volvió a descender. -¿Qué es para usted lo más positivo de su trabajo? -Esta es una profesión que me permite tener un trato muy directo con el público, conocer gente nueva e incluso entablar una amistad. Por el contrario, lo menos llevadero son las bajas temperaturas que tenemos que soportar en el taller en invierno y el horario partido en verano, ya que no puedo realizar las actividades de ocio típicas de esa época del año. -¿En qué medida está afectando al taller la crisis del carbón que sufre el valle? -El rendimiento ha disminuido considerablemente por el descenso de población de la comarca provocado por las prejubilaciones del sector minero. Se está notando bastante el hecho de que este colectivo se vaya a vivir fuera de aquí. -¿Cuáles son los cambios más significativos que se han producido en la mecánica de los coches a lo largo de estos 30 años de profesión? -Muchísimos. Quizás uno de los cambios más significativos es el de los motores diesel y de gasolina, que han pasado de ser de carburación a inyección. En estos años los fabricantes han mejorado tanto el sistema de dirección, ahora es asistida, como el de frenado, suspensión, habitáculo y climatización. Las nuevas tecnologías permiten manejar mejor el coche, pero dan más averías y más costosas. -¿Y esos cambios han influido en las reparaciones? -Sí. Antes una pieza solía valer para todas las marcas de coches y ahora tienes que recurrir a la firma oficial del vehículo. Por otra parte, estas piezas te las servían en el día y en la actualidad para las reparaciones más grandes hay que esperar unos días. Como positivo cabe destacar la ayuda de las máquinas.