Afectados particulares se ratifican en sus acusaciones en el caso del oro

Los demandantes de Valladolid relataron ante los magistrados de la sección tercera de la sala de lo penal de la Audiencia la forma en la que fueron captados a través de diversas vías por la empresa Cosemp para que invirtieran sus ahorros en oro, con unas rentabilidades anuales que oscilaban entre el 12 y el 14%. Sin embargo, esos ahorros nunca fueron invertidos en el metal precioso, como ya reconociera el principal acusado Jacinto González durante su declaración del pasado lunes. El dinero iba destinado a costear las deudas de Cosemp y a sufragar los intereses de anteriores inversores. Una de las formas por las que eran inducidos estos afectados era por la sociedad Ayser, radicada en la capital pucelana, y que ofrecía entre sus servicios el oro de Cosemp. Los dos socios de esta sociedad, Antonio Nistal y Pelayo Vélez (acusados también en el proceso) han incurrido en contradicciones durante sus declaraciones y los dos se han desvinculado de formar parte activamente del entramado que dirigía Jacinto González y han negado que conocieran la verdadera situación del negocio. Ayer, algunos de los testigos relataron ante el tribunal cómo se decidieron a invertir en oro a través de Ayser e inculparon a Pelayo Vélez en el proceso de captación Aplazamiento El proceso quedó suspendido al finalizar la sesión de ayer hasta el próximo día 30 de enero. El galopante retraso que ha ido acumulando el proceso (en un principio estaba prevista su finalización para ayer) ha provocado que hayan quedado pendientes las declaraciones de otros testigos y peritos, así como las conclusiones finales. La Audiencia juzga la presunta estafa de más de seis millones de euros por presuntas inversiones en oro en todo el territorio nacional. Una de ellas, la más polémica, fue la de la Junta Vecinal de Quintanilla de Somoza, que en 1993 y 1994 invirtió unos 865.000 euros en el metal precioso (se le reclama al acusado unos 760.000), procedentes de los beneficios que obtuvo por la venta de terrenos al Ejército para el campo de tiro del Teleno. Tanto los miembros de aquella junta como el principal acusado Jacinto González ya fueron condenados en su día por prevaricación y cohecho. Los acusados en el proceso de la Audiencia, además de González (que ha reconocido los hechos), son Antonio Nistal y Pelayo Vélez (presuntos colaboradores) y el hijo del principal acusado, que era el encargado de realizar los ingresos y los pagos de Cosemp. El fiscal pide ocho años de prisión (podrían quedar en seis) para Jacinto González y las acusaciones particulares penas que van de cuatro a diez para el resto.