El ministro Rato recibirá a los sindicatos mineros el día 12
El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Rodrigo Rato, se reunirá el próximo miércoles día 12 con los responsables de minería de los sindicatos UGT y CC.OO. El número tres el Ejecutivo de José María Aznar y máximo responsable de la política energética y carbonera acepta así la exigencia que le habían planteado tanto la Federación de Industrias Afines de UGT como la Minerometalúrgica de Comisiones al objeto de abordar el futuro del Plan del carbón, la reserva estratégica europea y la política para el sector. Los sindicatos venían denunciando además una falta de interlocución con responsables de Minas y Energía con capacidad decisoria y la dilación en el tiempo desde la última reunión con el ministro Momento clave Al encuentro acudirán los responsables regionales y tanto el secretario general de la Federación Minerometalúrgica de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo, como la secretaria general de la FIA-UGT, Francisca Sánchez Chinarro -sólo suelen acudir a reuniones de este tipo en momentos cumbre o críticos, como este-, que solicitaron recientemente por carta a Rato una reunión urgente ante lo que consideran un «incumplimiento» del Plan del carbón 1998-2005; además, exigían la reconsideración y la retirada de la comunicación a la UE de la reserva provisional de producción hasta el 2005: 12 millones de toneladas, una menos de lo estipulado y pactado en el plan minero para esa misma fecha. Sombras de huelga Ambos sindicatos denuncian también una serie de «incumplimientos y retrasos significativos en la gestión del plan». UGT advirtió incluso de la posibilidad de convocar una huelga general en la minería del carbón tras el «intento del Gobierno de cambiar de forma unilateral del plan»; CC.OO, no se ha posicionado oficialmente todavía y espera al resultado de la reunión con Rato para pronunciarse sobre sus estrategias de futuro. En lo que sí coinciden ambos sindicatos es en que el gobierno central ha rebajado la interlocución, roto un consenso de un lustro y aprovechado el cambio de legislación europea para el sector a fin de ponerlo en dificultades y lograr su pretensión de reducirlo lo más posible y en el menor tiempo. Ambas centrales acordaron presionar y dar una oportunidad a Economía de dar marcha atrás en su más reciente política. Desde 1997 las relaciones entre sindicatos mineros y gobierno nunca fueron tan tensas.