Más de treinta proyectos de circuito en España jamás se construyeron

La lista de proyectos de circuitos fallidos en España, entre los años 1972 y 2002, supera la treintena, según ha podido saber este periódico. Sevilla, Orense, Mallorca, Sagunto, Gandía, Tenerife e incluso el mismo Cheste figuran en ella. De hecho, la historia de lo que hoy es el Circuito de Comunidad Valenciana, recoge que esta instalación se inauguró el 19 de septiembre de 1999 «tras 25 años de intentos y proyectos fallidos». En la relación que se dio a conocer ayer, el último fiasco para el circuito Ricardo Tormo (Cheste) se produjo en 1990. Es El Jarama el decano de los trazados españoles, que, según datos de la Comunidad de Madrid, contó con las instalaciones adecuadas en 1974, aunque ya en 1947 se celebró en el lugar la primera carrera. Dos años antes de que se completaran sus infraestructuras, Sevilla y Orense se llevaban las primeras decepciones. El director general de la consultora HCC -empresa que redactó el plan director para el ansiado circuito de La Bañeza-, reconoció ayer que el número de intentos de contar con una pista es elevado y que, en ocasiones «se han cobrado muy caros, sin que estuvieran respaldados por un estudio de viabilidad previo. Lo peor de estos casos es que agotan un recurso limitado: la ilusión». «El único serio» Gonzalo, cuya firma lleva la dirección técnica de El Jarama, también se refirió al número de proyectos «hermanos» del de La Bañeza que han surgido a lo largo de los meses en que la ciudad lucha por hacer realidad su sueño y que cobraron actualidad la semana pasada, con el anuncio de que el Ayuntamiento de Salamanca trabaja ya en la construcción de una pista: «El único proyecto serio que existe, que además se ha pedido desde la base de la sociedad, es el de La Bañeza». Según el director general de HCC, sólo un ingeniero de caminos está capacitado para firmar el proyecto de un circuito permanente de velocidad y destacó que en el caso del Circuito de Cataluña (Montmeló), los técnicos de la Generalitat de Cataluña fueron los encargados de esta tarea «con bastante acierto».