«¿Se lo explico en inglés?»

El consejero de Educación y Cultura, Tomás Villanueva, prefirió ayer reir en ver de echarse a llorar ante lo mucho que le costó hacerse comprender por los procuradores de la UPL. «¿Me entiende usted o se lo digo en inglés?», llegó a preguntar directamente a Daniela Fernández, quien a pesar de todo lo que se dijo, lo mucho que se prometió y la de veces que se repitió ayer en las Cortes, no se lo acababa de creer. Y es que habría que recurrir a la transcripción del intenso debate que todos ellos protagonizaron ayer en Fuensaldaña para saber cuántas veces llegó a decir Villanueva que sí, que lo del circuito es ya una realidad, que será en La Bañeza, que de inmediato empezarán a darse todos los pasos... Lo que no le hizo ninguna gracia al consejero de Educación y Cultura fue que el leonesista Joaquín Otero ilustrara con un brillante casco de «motero» su incredulidad. Ni corto ni perezoso, Otero optó por esta escenificación frente a seguir escuchando «más de lo mismo», lo que levantó las críticas más ácidas y peor contenidas de Villanueva: «Esto no es serio..., eso es reirse de La Bañeza..., ha hecho usted el ridículo..., me duele profundamente..., desprestigia usted las instituciones...». Sin embargo, lo que a nadie le pareció realmente serio fue que el vicepresidente de las Cortes instara hasta en tres ocasiones a la procuradora leonesista y bañezana a que guardara silencio, lo que, ante su negativa, le obligó a exigirle que abandonara el hemiciclo. Pues que no, que la procuradora no abandonaba el hemiciclo, que el pleno se suspende hasta diez minutos, -lo que no es nada habitual-, y que, como si no pasara nada, se vuelve a reanudar con otra cuestión y aquí paz, y después guerra. Contrasta tal falta de autoridad en un Parlamento autonómico con el exceso de contundencia, en este caso policial, que los regantes del Carrión sufrían en esos mismos instantes a las puertas del castillo de Fuensaldaña.