EL OTRO ACUSADO

Valerio Antón figura como presidente del consejo de administración de Carbones Alto Rueda y se enfrenta a una petición de tres años de cárcel por alzamiento de bienes y fraude. Ya fue condenado a 32 meses de prisión por la Audiencia Provincial por cuatro delitos contra la Hacienda Pública por considerarse probado que la mina defraudó entre 1991 y 1992, 1,1 millones de euros por impago de impuestos. La defensa alegó que Antón carece de estudios, que la familia García Brugos le hizo firmar documentos que ni miraba ni entendía y que fue utilizado como un hombre de paja aprovechando que era un simple empleado al que elevaron a la categoría sólo nominal de presidente del consejo. «Ni mandó ni supo qué hacían», dijo.