«El pan sólo engorda cuando se consume con otros alimentos»

-¿Qué es lo más duro de su oficio? -Lo peor de todo es que no tienes horarios. Trabajas por la noche y luego tienes que repartir por el día. -¿Hace falta una cualidad especial para dedicarse a ello? -Dedicación y ganas de hacerlo bien. Y es que nadie nace panadero, a pesar de que yo lo haya vivido desde pequeño. Luego, poco a poco vas aprendiendo el oficio. -¿Qué es lo que más se vende? -Sin duda alguna la hogaza. No obstante, nosotros trabajamos catorce variedades. -¿Es cierto el dicho popular de que el pan engorda? -El pan sólo engorda cuando no lo comes sólo. Hace unos años existía una corriente que decía que el pan engordaba mucho y ahora se ha demostrado que no es así, con todo, en los últimos quince años el consumo medio por persona y año ha bajado de 87 a 58 kilos. Actualmente las nuevas generaciones consumen menos pan y eso se debe a la mala información que tienen al respecto. -Desde hace 16 años cuando empezó en este oficio, ¿ha cambiado mucho? -Bastante. Y es que hay que evolucionar para seguir al pie del cañón. En los últimos años lo que más ha cambiado es el sistema de elaboración y la introducción de nuevas tecnologías. No obstante, la calidad no se ha visto mermada e incluso se han podido hacer más cosas que antes eran imposibles con los sistemas tradicionales. Trabajar por la noche -Trabajar por la noche, ¿como se lleva? -Simplemente se lleva, aunque nunca te acostumbras. La noche es para dormir aunque en este oficio tienes que dejarlo para otras horas del día. -Antes una panadería se dedicaba exclusivamente a elaborar pan y ahora parece que van ampliando sus productos, ¿es necesario? -No hay más remedio que dedicarse a todo ello. Y es que si quieres mantener una cierta solvencia económica tienes que diversificar tu oferta. Eso sí, el pan sigue siendo el producto estrella de las panaderías. -¿Les afecta la competencia que pueden ofrecer las grandes panificadoras? -Cada vez menos. Eso se debe a que la gente sigue confiando en las pequeñas y medianas panaderías porque saben que la calidad que podemos ofrecerles es la óptima. -Poner en marcha una panadería o mantenerla a flote, ¿cuesta mucho? -Bastante. El problema de este producto es que tiene unas horas de caducidad y es complicado calcular la gente que diariamente te lo compra. A eso hay que añadir la inversión que necesitas para ofrecer un producto de calidad. -¿Qué calidad tiene el pan que se fabrica en Astorga? -Sin duda alguna tenemos el honor de fabricar en esta ciudad el mejor pan de la provincia. Prueba de ello es que mucha gente viene a comprárnoslo desde otros sitios y repite. -¿Cuales son sus proyectos a corto plazo? -En principio mantener lo que tenemos e irnos acoplando a los nuevos tiempos. Actualmente se desconoce el futuro en cierta medida porque a la gente no le gusta trabajar en esto. No obstante, a medio plazo la cosa no creo que vaya mal para los que ponemos esmero en ello.