La Junta cerrará una clase porque no se alcanza el número mínimo de alumnos

Los padres de los niños del colegio público San Andrés de Pobladura de Pelayo García hicieron ayer un acto de protesta ante el anuncio por parte de la Consejería de Educación de que para el próximo año se clausuraría una de las dos aulas o unidades educativas con las que cuenta el centro por falta de alumnos. De momento, solamente se ha producido una concentración frente a las escuelas pero los padres no descartan tomar otras medidas si finalmente el aula en cuestión se clausura de forma definitiva. Por falta de un niño El canon establecido por la Junta es que debe haber al menos doce niños para que las dos unidades sigan abiertas. El próximo curso el colegio de Pobladura sólo contará con once pequeños repartidos en diferentes cursos de Educación Infantil y Primaria y dos profesores fijos, además de los itinerantes. El cierre supondría que uno de los dos maestros fijos se suprimiría y que el que se quedase tendría que dar clase a los once alumnos repartidos en seis cursos distintos: dos de tercero de Infantil, tres de primero de Primaria, dos de segundo, uno de tercero uno de quinto y dos de sexto. Los padres y profesores estiman que de este modo la calidad de la enseñanza bajaría notablemente. En el presente curso el centro contaba con quince alumnos pero la despoblación, especialmente de matrimonios jóvenes, que sufren los pueblos ha hecho que ese número haya disminuido. La clausura no supone supresión definitiva de un aula ya que si en cursos posteriores el número de alumnos vuelve a sobrepasar los doce establecidos se volvería a reabrir. El ayuntamiento con el alcalde al frente, Crispiniano Madrid, ha manifestado su apoyo a los padres que harán lo posible porque el aula no se cierre.