El nuevo regidor afirma que se han perdido subvenciones para obras que ya están hechas
La corporación hereda unas pérdidas de más de medio millón
El anterior alcalde asegura que se pueden recuperar mediante recursos y reclamaciones
En más de 545.000 euros evaluó el equipo de gobierno el montante de las pérdidas correspondientes a seis subvenciones de parques nacionales solicitadas por el Ayuntamiento de Posada de Valdeón entre los años 1999 y 2002, y denegadas por el Organismo Autónomo por incumplimiento de las condiciones estipuladas. En torno a este asunto discurrió el tenso pleno extraordinario celebrado ayer por la tarde en Posada y al que acudieron unos cuarenta vecinos a interesarse por el asunto. Durante el pleno, el nuevo alcalde socialista, Mariano Rojo, explicó que la gravedad del problema no reside únicamente en que se deje de percibir cierto dinero, sino que se debe devolver aquello que se adelantó en concepto de anticipo y que asciende a más de 185.000 euros, a lo que habrá que añadir el valor de las obras ya realizadas por los contratistas, cantidad que supera con mucho los recursos propios municipales durante un ejercicio. Por su parte, el ahora líder de la oposición y anterior alcalde, el popular Luis Ángel Alonso, explicó que no se habían agotado las posibilidades de reclamación, ya que se puede establecer un recurso de reposición, además de recurrir al contencioso administrativo, argumentando los problemas habidos con las contratas de las obras en cuanto a la demora en los plazos de certificación. El equipo de gobierno no se mostró partidario de continuar los pleitos administrativos sin garantías técnicas de que sean fructíferos, pues en una de las subvenciones denegadas ya se siguió ese camino y solo condujo a incrementar el gasto municipal por los costes del litigio. El pleno aprobó con los votos del PSOE e IU y con el voto en contra de los tres concejales populares, no gastar más recursos del Ayuntamiento en recurrir las resoluciones de revocación si no se tienen informes jurídicos previos favorables, sin renunciar a los recursos de reposición, así como iniciar acciones legales para depurar las responsabilidades. También se tranquilizó a los contratistas que habían cumplido con sus contratos de obra. Al final del pleno y según se había comprometido el equipo de gobierno antes de la toma de posesión, se permitió un turno de palabra entre los asistentes.