Quejas de los usuarios por el acabado y la lentitud de la carretera de Omaña

Los usuarios de la carretera comarcal de Omaña, la LE-493, se ven frustrados por el lamentable estado que presenta esta calzada, la lentitud de las obras para su remodelación, y la falta de iniciativas políticas encaminadas a exigir una mejora de esta vía de comunicación. El alcalde pedáneo de Villanueva de Omaña, José Antonio Manilla, ha hecho un llamamiento a todos los alcaldes de los pueblos afectados para que se movilicen, y el alcalde de Villablino, Ángel Crespo, también se mostró favorable a una iniciativa de este tipo, pero de momento la falta de decisión está permitiendo que la carretera siga en un estado lamentable, especialmente en el tramo comprendido entre Rioscuro de Laciana y el alto de La Magdalena. El mas crítico con el transcurso de las obras ha sido el presidente de la Junta Vecinal de Villanueva, que además de afirmar que las obras realizadas en la travesía del pueblo se han caracterizado por presentar numerosas deficiencias, insiste en que a lo largo del trayecto de la carretera se están sucediendo las chapuzas. Manilla hace un llamamiento a todos los pueblos afectados para evitar que se finalicen las obras de forma deficiente, y lamenta que «han malgastado el dinero y ahora nos han dejado sin carretera». También se pregunta donde están los técnicos encargados de analizar la calidad, porque algunos de los tramos finalizados ya han empezado a presentar carencias que ponen en duda este hecho. Concretamente en varios tramos del alto de La Magdalena, la capa de rodadura está saltando, y los baches se han adueñado de un firme que debería estar perfecto. Además, a lo largo del trayecto, el ancho de la calzada estrecha o agranda en función de los obstáculos que los responsables de la obra se iban encontrado, los tramos asfaltados se alternan con otros en tierra, y las deficiencias se suceden a lo largo del recorrido afectado por unas obras de remodelación financiadas con 1.249 millones de pesetas (más de 7,5 millones de euros) de los fondos mineros, y de cuyo destino final se empiezan a tener dudas. Pero el tramo que menos ha sentido las obras de reforma sigue siendo el comprendido entre la localidad de el Villar de Santiago y Rioscuro de Laciana, donde en lugar de ensanchar la vía respetando el proyecto original, han preferido acometer solo las zonas menos difíciles, y poner un letrero donde se advierte a los conductores con un irónico cartel: «Carretera de montaña, línea discontínua en 4 kilómetros». El alcalde de Villablino se ha mostrado favorable a formar una plataforma conjunta de todos los municipios afectados para exigir que las obras de reforma de la carretera se lleven a cabo de acuerdo con el proyecto inicial, aunque señaló que de momento «nadie se ha puesto en contacto conmigo por este hecho». El descontento ya había provocado hace varios meses una concentración de medio centenar de personas, llamados por las principales fuerzas políticas y sociales de Laciana. Entonces se prometió por parte de la Junta una mejora en los trabajos, y respetar la misma anchura de la calzada. 1396927554