Los regantes terminan su encierro al recibir agua en Toral de Fondo

La decena de regantes que permanecieron encerrados la noche del viernes al sábado en la sede astorgana del Sindicato Central del Pantano de Villameca regresaron ayer pasadas las dos de la tarde a sus casas, en la localidad de Toral de Fondo, perteneciente al municipio de Riego de la Vega. Los agricultores finalizaron su protesta al ser informados por teléfono por sus familiares de que el pueblo había recibido el agua de la que el sindicato le había privado después de que los regantes se negaran a pagar el porcentaje correspondiente de las obras de reposición del Reguero del Monte y la canalización de riegos hasta Toral de Fondo, según confirmó el presidente de la junta vecinal, Domingo Domínguez. «Lo que queríamos es tener agua, ya la tenemos. ¿Para qué perder más tiempo? Además, si la situación se repite volveremos a encerrarnos», aseguró ayer el pedáneo. En la noche del viernes los agricultores compartieron una cena, servida por un bar cercano, a base de empanada, callos, huevos, mollejas o ensaladilla, que acompañaron con vino y agua. Las altas temperaturas hicieron que optaran por cenar al fresco de la calle, donde la espera continuó con conversaciones sobre anécdotas de la labranza a la antigua usanza, y sobre su preocupación ante la situación que atravesaban. Dormir sobre sillas Los encerrados intentaron dormir, ya de madrugada, sentados y con los pies apoyados sobre sillas, pero con poco éxito. Varios agentes de la Policía Nacional se turnaron para vigilar a los regantes, que, ya por la mañana, desayunaron y explicaron a los vecinos que se interesaban por su presencia el por qué de la misma. Mientras, Maximino Posada, presidente del sindicato, se personó ayer en la comisaría de Astorga para buscar una solución al problema, pero declinó hacer declaraciones a este periódico. Los regantes no pudieron confirmar ayer si la citada entidad de riego los denunció finalmente por ocupación de sus locales en la ciudad.