Dos jóvenes se ahogan en el río Esla cuando practicaban piragüismo

Dos jóvenes fallecen ahogados en el río Esla cuando estaban practicando piragüismo en una zona próxima a la localidad leonesa de Las Salas. Concretamente el accidente se produjo en el lugar conocido como El Salto del Molino, donde abundan los remolinos una vez pasado este salto y que se convierten en peligrosos a medida que el caudal del río es mayor. El mayor problema se produce en la margen derecha corriente abajo dado que es donde se encuentra uno de los mayores remolinos y que fue donde los dos piragüistas, un chico y una chica, quedaron atrapados. El hecho de que llevasen chalecos salvavidas no le ayudó en esta ocasión puesto que la fuerza del agua era muy fuerte. Testigos, vecinos de Las Salas señalaron que los dos cuerpos permanecieron durante tiempo dando vueltas en el propio remolino. Un tercer piragüista fue quien avisó del accidente. Entonces se procedió a la operación de rescate de los piragüistas por parte de una dotación del Greim de Sabero de la Guardia Civil estuvieron ayudados por dos helicópteros. Las operaciones de salvamento se hicieron muy complicadas para hacerse con los cuerpos y fue necesario proceder a reducir el caudal del río Esla cerrando en parte las compuertas del embalse de Riaño. Reducción del caudal del río Esta reducción del caudal favoreció que el remolino perdiese fuerza y los cuerpos fuesen expulsados fuera. Uno de ellos fue rescatado a pocos metros del luchar del accidente mientras que el otro se lo llevó la corriente y fue rescatado varios metros más abajo, ya próximo a la localidad de Crémenes. La evacuación de los cuerpos se hizo por medio de helicóptero que los trasladó al tanatorio de la localidad de Cistierna. Al parecer los fallecidos podrían ser de la provincia de Salamanca dado que su vehículo tenía esta matrícula. El salto del Molino de Las Salas es una zona muy peligrosa y que suele evitarse por los que conocen esta zona y más concretamente uno de los grandes remolinos que existen nada más pasar el salto, por lo que se suele evitar. «Concretamente los que durante todo el verano practican rafting suelen iniciar las bajadas después del salto ya que conocen su peligrosidad sobre todo cuando el caudal del río es alto», señaló una vecina de Las Salas.