Un monumento sin horario de apertura y cierre

Para visitar la iglesia de Santa Colomba y contemplar su artesonado mudéjar, por el que fue declarada monumento histórico, el visitante debe conseguir la llave en casa de las hermanas Alfayate Santos, que residen cerca del templo. «El sistema funciona» Según el pedáneo de Santa Colomba, el actual sistema de visitas funciona y destaca la labor de estas mujeres por su carácter altruista. Las hermanas Alfayate se hicieron cargo de la llave de la iglesia hace tres años y no tienen obligación de enseñar la iglesia, aunque lo hacen si alguien lo solicita. El culto En principio, la iglesia se abre única y exclusivamente para la celebración del culto. Es decir, una vez al día, excepto este mes de agosto, en el que un sacerdote natural del pueblo decía una misa más, en horario de mañana. Si no fuera por las hermanas Alfayate, el templo permanecería cerrado el resto del tiempo. En otro tiempo Según el pedáneo y una de las responsables de la iglesia «hace unos cuatro o cinco años la Diputación pagaba a unas personas porque la iglesia permaneciera abierta entre los meses de julio y septiembre». Al parecer, en la época estival y según las mismas fuentes, se podía visitar la iglesia durante cuatro horas, dos por la mañana y otras dos por la tarde.