El Ayuntamiento elimina barreras arquitectónicas en la calle principal

El Ayuntamiento de Castrocontrigo ha decidido rebajar los bordes de las aceras en la calle principal que da nombre al municipio, la avenida del Rey Gunderico, para facilitar el cruce de la misma a las personas mayores, medida que se une a la decisión de pintar pasos de peatones, ejecutada a principios de este verano. En realidad, la citada avenida es la travesía de la carretera CL-622, que permite el paso a la comarca zamorana de Sanabria y a la capital portuguesa de Braganza y, también la entrada en la comarca de Cabrera. El socialista Óscar Carracedo, que gobierna con un pacto con el PP, manifestaba ayer que «teníamos unos bordillos impresionantes» y que la medida se encamina a evitar accidentes, no sólo por la posibilidad de caerse al cruzar la calzada, sino también porque «los peatones circulaban por la carretera para evitarse el tener que subir y bajar a la acera», explicó el regidor. El rebaje de los bordillos en los lugares de cruce no resulta una obra de importante coste para el Ayuntamiento, ya que «la obra se realiza gracias al convenio suscrito con el Inem, según el cual el Ayuntamiento dispone de tres trabajadores, y tan sólo hay que picar la zona del rebaje y hormigonar», dijo Carracedo. Vecinos de Castrocontrigo consultados ayer veían con buenos ojos la iniciativa de su Ayuntamiento. Si bien no se puede hablar de un colectivo de discapacitados en Castrocontrigo, su población está sensiblemente envejecida, con los inconvenientes de movilidad que eso supone. En total son nueve los rebajes de bordillos que quedaban por hacer ayer por la tarde, dada la longitud de la calle. Por otra parte, los mismos operarios trabajan en la nivelación de los registros del alcantarillado, que, hasta el momento, quedaban a un nivel inferior que el asfalto, formando un bache. Los trabajadores han aprovechado esta labor para limpiar estos sumideros de materia depositada en su fondo. En otras localidades El alcalde manifestó también su deseo de que actuaciones de este tipo se puedan llevar a cabo también en Torneros de la Valdería y en Nogarejas, «aunque sólo sea en las calles principales, como es el caso de la cabecera del municipio». En concreto, los vecinos de Torneros de la Valdería manifestaron su malestar el año pasado cuando, una vez concluidas las obras de mejora del firme y ampliación de la carretera Castrocontrigo-La Baña, los registros de desagüe quedaban a un nivel inferior que el del nuevo asfaltado. Según el regidor, el único inconveniente que se podría dar para actuar en estas dos localidades sería el final del convenio entre el Ayuntamiento y el Inem, que permite al municipio contar con trabajadores que se ocupen de este trabajos. Carracedo señaló que el acuerdo expira a finales de este mes.