Los maragatos asentados en Buenos Aires recuerdan su patria

Ya han trancurrido más de 79 años en que un grupo de valense radicados en Buenos Aires se reunían en un bar de la calle Junin, propiedad de alguno de ellos, con el fin de estar vinculados con las noticias que llegaban del pueblo, ya fuese por intermedio de sus familiares o por el maestro Eugenio Diez García. Poco tiempo después se fueron agregando más y más compoblados, alquilando una pequeña secretaría en un centro español de aquella época. Así nació el 18 de mayo de 1924 el centro Val de San Lorenzo y por iniciativa de comisión directiva inicial, se compra el predio de la calle Jaramillo, 3067. En su terreno se colocaron las piedras de bolos dónde sábados, domingos y días festivos los socios concurrían y recordaban la patria chica. El centro tiene por objetivo principal reunir a los hijos del Val, sus descendientes y amigos. En octubre de 1959 y con el fin de albergar a todos los maragatos, se le cambia el nombre por centro maragato Val de San Lorenzo. Los pocos maragatos y sus descendientes que quedan en la zona siguen peleando por mantener la tradición y honrar la comarca leonesa de su procedencia. Para ellos, algunos sin conocer la región, es una necesidad tener un lugar que les una con sus orígenes y su patria chica.