Toral de los Guzmanes | Alta calidad y gran participación en el concurso de vacas de raza frisona
El Hostal Palazuelo pagó 9.400 euros para conseguir el lechazo de la subasta
García Prieto apuesta por consolidar una empresa de transformación de leche
Si en la edición del 2002 de la feria de ganado de Toral, la subasta de un lechazo batió todos los récords, al alcanzar los 12.020 euros, la puja de ayer tampoco se quedó corta. El Hostal Palazuelo, que cuenta con un restaurante en Villaquejida y otro en Villamañán, llegó a ofrecer 9.400 euros para poder saborear las carnes de tan exquisito lechazo. Una subasta que, a pesar de estar abierta, no contó con mucha participación, resumiéndose a dos o tres los hosteleros dispuestos a pujar. El precio de salida no era para menos, 300 euros, que se iban aumentando de 300 en 300, hasta alcanzar la cifra de 9.400 euros. El Hostal Palazuelo, ya había participado en la subasta del 2002, quedando en segundo lugar. Ayer anunciaba que organizará un gran evento para dar a conocer la calidad de los productos de esta comarca en una gran comida o cena donde espera contar con representantes de las distintas administraciones públicas, así como de los sectores de productos representativos, como el pimiento, tomate y el cordero de esta comarca. El concurso de vacas de raza frisona congregó a numerosos ejemplares. El presidente de la Diputación, Javier García Prieto, reconoció la gran calidad de los animales expuestos en este concurso, que suponen «un ejemplo de especialización selectiva donde la ribera del Esla ha sido capaz de concentrar el 60% de esta cabaña y por consiguiente de la producción de leche de esta provincia. Lo único que falta es consolidar en esta zona una industria de transformación que permita que el valor añadido que se genera pueda también revertir de forma directa en la comarca», indicó. Mejora genética Por su parte el también diputado provincial y secretario general del sindicato agroganadero, Ugal-UPA, Matias Llorente, destacó de este certamen la mejora genética que se ha alcanzado, la gran calidad que ha duplicado el rendimiento por vaca y sobre todo la forma en manejo y producción. Llorente lamentó la crisis que vive este sector, sobre todo la falta de control en el precio de la leche. «Ahora mismo hay un reto muy importante de intentar controlar toda la leche negra, si hay voluntad política el sector resurgirá, es preciso controlar no sólo la cuota al ganadero, también a los transformadores, fabricantes y grandes superficies comerciales». Cientos de personas acudieron a las dos jornadas de concurso y exposición, una cita que se ha consolidado con el paso de los años y que ha alcanzado su estatus a nivel no sólo regional sino también nacional, como lo demuestra la espectación de sus concursos y la subasta del lechazo, que este año cocinará el Hostal Palazuelo.