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La Robla | La línea León-Bilbao estuvo cerrada once años para los viajeros y se reabrió el pasado mes de mayo Villamanín

El tren hullero se consolida con 16.000 viajeros en cuatro meses PSOE y UPL niegan que la red del agua esté concluida

Feve cree excelente el nivel de ocupación de un ferrocarril que se puso en marcha con 65 millones

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P. Infiesta J.A. Barrio Planillo - redacción corresponsal | villamanín
León

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La reapertura al tráfico de viajeros de la línea ferroviaria de La Robla ha sido «todo un éxito», según la empresa Feve, que se apoya en los más de 16.000 usuarios que ha recibido el tren en tan sólo cuatro meses. El trazado hullero desde la provincia hacia Bilbao se cerró al público en 1991 por diferencias económicas y fue reabierto el pasado 19 de mayo, tras una inversión de 65 millones de euros aportados por el Ministerio de Fomento, Feve y la Junta de Castilla y León. Para la compañía de ferrocarriles de vía estrecha, el esfuerzo inversor para poner de nuevo en marcha el tren hullero tras once años de suspensión y la amplia repercusión social que tuvo la reapertura de la línea «han influido directamente en los excelentes resultados obtenidos desde la partida del primer tren de viajeros» a mediados de mayo. Feve asegura que la cifra de 16.000 viajeros «supera las previsiones más optimistas y confirma, además la creciente evolución del número de ususarios». De hecho, las estadísticas reflejan que un millar de personas se desplazaron en esta línea La Robla-Bilbao en la última quincena de mayo, más de 3.000 en junio, 5.002 en julio, 5.219 en agosto y 1.744 durante los primeros quince días de este mes. El aumento de pasajeros y de plazas se ha visto acompañado de un incremento de la revisión de los vehículos. Inicialmente sólo se efectuaba en Balmaseda y ahora también se realizan en Cistierna y León. El equipo de gobierno que conforman PSOE y UPL en el Ayuntamiento de Villamanín quieren salir al paso de las declaraciones vertidas por el anterior alcalde del PP, Oscar Gutiérrez Álvarez, en las que señalaba que las obras ya finalizadas de la pavimentación y red de aguas que se han llevado a cabo en la principal arteria que atraviesa la localidad, se habían ejecutado gracias al anterior equipo del gobierno popular. También declaraba que iban a solventar los problemas de la escasez de agua que se producen en la localidad durante la época estival cuando se duplica la población con la llegada de los veraneantes. En este sentido, PSOE y UPL desmienten esas afirmaciones aduciendo que las obras en la red de aguas «ya habían comenzado hace dos legislaturas cuando gobernaba el PSOE, y que fue el anterior alcalde del PP quien manifestaba que si repetía en el cargo iba a parar dichas obras». Sin adjudicar Además, el equipo de gobierno dice que el proyecto «no está ni muchos menos acabado porque aún quedan más fases por adjudicar para finalizar íntegramente la nueva red de saneamiento». También los ediles del PSOE y la UPL advierten de que los problemas de la escasez de agua no están solucionados y que «en los cuatro años de la anterior legislatura cuando gobernaba el PP nunca se limpiaron los filtros de las captaciones y en ocasiones el agua llegaba sucia hasta el depósito». El proyecto de las dos primeras fases ha contado con un presupuesto de 700.000 euros, sufragados de los fondos mineros. La primera ascendió a 432.000 euros, que sirvieron para renovar la red.