Familiares y vecinos homenajean a Nieves Blanco por sus cien años Desarrollo sostenible (y III)

Los vecinos de Villaseca de Laciana ofrecieron un sencillo homenaje a Nieves Blanco Fernández, después de haber superado la barrera de los cien años de edad, y convertirse en la vecina mas anciana del municipio. La jornada tuvo lugar el pasado domingo, con una misa solemne en su honor en la iglesia de Villaseca donde le fue entregada una placa conmemorativa por parte de la parroquia y otra del Hogar del pensionista de esta misma localidad. Posteriormente los integrantes de la Coral Santa Bárbara le ofrecieron un recital en su honor de forma desinteresada, y a continuación sus familiares la acompañaron en un banquete en el que no faltó la tarta con las velas que daban testimonio de que pasaba a formar parte del selecto club de los centenarios. De Posada de Omaña Nieves Blanco nació en 1903 en la localidad leonesa de Posada de Omaña, aunque a los 16 años se trasladó a vivir a Villaseca de Laciana, donde reside desde entonces. En el año 1918 conoció a su marido Ignacio Oyazabal, un empresario vasco que llegó a Laciana para participar en la construcción del ferrocarril de la Minero Siderúrgica de Ponferrada, y con el que tuvo 4 hijas que le han dado 6 nietos, a los que se suman hasta el momento 9 biznietos. La ahora centenaria apenas ha sufrido enfermedades a lo largo de su vida, y según sus hijas se mantiene en excelente forma física para su avanzada edad, aunque la vista le empieza a flaquear y le acompleja a la hora de dar paseos. No obstante sus familiares aseguran que mantiene intacta la inquietud y la actividad que le han caracterizado a lo largo de su dilatada vida. PODRÍAMOS continuar dándole más vueltas de tuerca al tema del desarrollo sostenible y de la diferente manera de verlo, existente entre los conservacionistas y las empresas inmersas en sacar todo el provecho posible que la tierra encierra en sus entrañas de la manera más radical, agresiva y también más rápida posible. Al estilo del lejano oeste de las películas americanas, en un toma el dinero y corre... Lo que luego quede aquí para restaurar (si fuera posible tal restauración, que esa es otra cuestión), no debe de preocupar a aquellos que se embolsan los millones de euros en subvenciones y otras minucias. Detrás vendrá la administración a hacer esa restauración que decimos con dineros públicos, de todos los contribuyentes... Podríamos continuar explicando que el desarrollo sostenible es eso que se vino haciendo por estos montes y vallas a lo largo de los pasados siglos. Eso, que en algunos de nuestros pueblos, aquellos donde los pedáneos siguen siendo hombres de paz a la vieja usanza, continúan realizando, como una corta de arboleda y su posterior repoblación; limpiando antiguos senderos para que el ganado pueda continuar pastando las buirizas de otoño; arreglando las fuentes que aún manan por nuestros montes; rehaciendo primavera tras primavera, los puertos de riego que las riadas invernales se llevan río abajo; y así un sinfín de cosas que de puro naturales y cotidianas apenas les damos importancia... No es desarrollo sostenible, sin embargo lo que otros desaprensivos pedáneos, con el poder de la democracia que los eligió en la mano, han hecho en muchos de nuestros pueblos, vendiendo fuentes y regueros, montes y valles, senderos y caminos, a cambios de cuatro duros que, encima han malinvertido en hormigonarnos hasta el alma de nuestros pueblos... Por esos, el hablar de un tema tan básico como esto del desarrollo sostenible, es algo muy fácil, cuando lo que ese está pensando es en el bien común, en que el Valle de Laciana tenga un futuro mañana. No hay que buscarle tres pies al gato con definiciones raras, y haciendo de todo un intríngulis incomprensible para el ciudadano de a pie que se piensa que en un futuro le van a cobrar hasta por el aire que respira. Hoy Laciana y todo lo que nos rodea, se encuentra dentro de un entorno al que la UNESCO ha querido proteger con la figura de Reserva de la Biosfera, dejemos que los altos organismos dicten, que es lo que se ha de hacer para que el futuro del Valle sea de color verde, color por otro lado del que pintan a la esperanza, que es lo último que dicen que se pierde... No permitamos que el color de nuestros bosques sea el de la desidia y el abandono al que nos condenan desde las administraciones españolas... Yo sé que estamos en el buen camino, en el camino del sentido común y el orden, y que esto está poniendo nerviosos a los que apuestan por anteponer el valor del dinero al valor de un futuro para todos. ¿Tendrá minería Laciana dentro de un futuro desarrollo sostenible? Por supuesto que sí, continuará teniendo minería, pero explotada racionalmente, no al estilo que se hace ahora. La minería de carbón explotada en bocamina ha sido compatible con otras facetas de la vida cotidiana en el Valle de Laciana a lo largo del siglo XX, porqué no podrá continuar siéndolo... Ahora sabemos que Laciana se encuentra en un momento en el que se ha de apostar por un futuro que son muchos futuros, con la declaración de Reserva de la Biosfera y su desarrollo sostenible... ¡¡¡No dejemos escapar esta ocasión!!!