Cerrar

La brigada de investigación apunta como causa las maniobras en condiciones desfavorables

Los técnicos dicen que el incendio de Pozos se produjo por negligencia

Señalan que el fuego afectó a zonas húmedas de interés especial y de protección para aves

Publicado por
Maite Almanza - astorga
León

Creado:

Actualizado:

La Brigada de Investigación de Incendios Forestales de León (BIIF) considera que el fuego originado en el interior del Campo de Tiro de El Teleno el pasado 3 de abril, que calcinó 270 hectáreas de terreno en la localidad de Pozos, en el término municipal de Truchas, comenzó «por una negligencia al realizar prácticas de tiro con unas condiciones meteorológicas que posibilitan que al aplicar una fuente de calor al combustible fino muerto (material vegetal seco), éste pueda inflamarse originando un fuego y propagándose a continuación». En el informe hecho a petición del Servicio Territorial de Medio Ambiente de León, la brigada señala que el incendio «afectó al paraje denominado Turbera de Xan de Llamas, en el término de Truchas, catalogado bajo la figura de Zona Húmeda de Interés Especial», así como «al LIC-Zepa Montes Aquilanos, Zona de Especial Protección para las Aves», en el mismo municipio. La junta vecinal de Pozos se personó como perjudicada y acusación particular en las diligencias previas del juzgado número 1 de Astorga, que fueron sobreseídas de forma provisional y archivadas en agosto a petición del fiscal. Éste consideró que los hechos no constituían una imprudencia grave, por lo que, a su juicio, escapaban de la vía penal abierta en el citado juzgado. La pedanía aspira ahora a que se reabra el caso, y solicitó a la delegación en León de la administración autonómica que ésta se persone en la causa como acusación «tal y como vienen haciendo de forma ordinaria en todos los casos de incendios forestales con autor conocido». Mientras, la sección de Defensa del Medio Natural valoró en 55.133,12 euros las pérdidas, estimación del impacto ambiental y los gastos de extinción causados por el fuego. Inicio dentro del campo El informe técnico indica que las llamas comenzaron en el interior de las instalaciones militares -donde calcinaron 60 hectáreas-, en el término municipal de Lucillo, y que fueron detectadas entre las 20.00 y las 21.00 horas del 3 de abril de 2003. Además, concluye que ese día había viento dominante del norte-noreste «con rachas superiores a los 20 kilómetros por hora desde las primeras horas de la mañana». La humedad del material vegetal seco era inferior al 12%, aunque «suficiente para que estuviera disponible para arder, con la simple aplicación de una fuente de calor exterior». La brigada descarta la existencia en la zona de rayos, líneas eléctricas, colmenas, u otro fuego activo, que podrían haber incidido en el suceso, y no halló indicios de que el lugar en el que éste se originó fuese zona de paso o pastoreo de ganados. Sin embargo, el informe recurre a las indicaciones de los agentes forestales y de los vecinos del lugar para señalar que el 3 de abril «se estuvieron realizando prácticas de tiro por maniobras en el interior del campo...por la tarde y hasta las 24.00 horas aproximadamente». La brigada señala que a las 14.56 horas del 4 de abril la autobomba de Tabuyo es requerida para que vigile el fuego, y que a las 17.45 horas ésta advierte de que las llamas se desplazan hacia Pozos; once minutos después comienza la extinción. A las 20.35 el incendio alcanza Campo de Pozos, y a las 21.09 los operarios abandonan las labores «al estar oscureciendo y no ser seguro continuar los trabajos sin luz por las condiciones del terreno». En ese momento el incendio está extendido. Las llamas quedaron extinguidas a las 12.02 del día siguiente, sin que interviniera un helicóptero llegado desde Zamora.

Cargando contenidos...