«No creo que el actual gobierno municipal del PP sea bueno para los ciudadanos de Mansilla de las Mulas»
El sustituto de José Ramón Tuero en el cargo de concejal será Lázaro Merino González, de 30 años, según explicó ayer el anterior alcalde de la villa. Tuero renunciará a su acta de concejal en el último punto del orden del día del pleno que se celebra hoy en el Ayuntamiento mansillés. -¿Cree que Mansilla está en buenas manos gobernando el PP? -Lamentablemente pienso que no, aunque hay que darles tiempo. Teníamos una candidata estupenda en el PSOE, Camino Pescador, pero incomprensiblemente pese a ser la lista más votada, un pacto legítimo pero injusto privó al PSOE de seguir gobernando en Mansilla. No creo que el actual gobierno municipal del PP sea bueno para los ciudadanos de Mansilla de las Mulas. Sobre todo en cuestiones urbanísticas, pero eso es algo que los ciudadanos verán en el futuro. -¿Por qué deja ahora su puesto de edil y no cuando dimitió como alcalde? -Porque tenía un compromiso con Mansilla y no quería dejarlo de golpe. Ya dije que continuaría unos meses como concejal, pero la realidad de mi trabajo, que se efectúa en otra provincia, me impide estar en Mansilla todo lo que quisiera y hay que ser honesto y dejar que me sustituyan porque lo harán mejor. -¿De los proyectos que inició en Mansilla de cuáles está más orgulloso y de cuáles tiene más preocupación de que se pierdan? -Uf, son muchos. El PSOE trabajó todo lo que pudo por hacer las cosas bien. El mayor logro fue el solucionar el problema que existía con la etnia gitana, que se hizo de una forma efectiva como se puede ver hoy. Otro, convertir a Mansilla en un ejemplo de política municipal de empleo para Ayuntamientos más grandes. Y también conseguir la nueva Sección Agraria Comarcal y la Residencia de Ancianos. De lo que queda, me preocupa que se retrase la autovía León-Valladolid y el arreglo de la carretera a Palanquinos. Son fundamentales. -¿Volverá a León? -Mansilla y León están dentro de mí. Son parte importante de mi vida y seguiré viniendo en visitas privadas. Y en lo político nunca se puede vaticinar, pero no me desagradaría trabajar por ellas de nuevo.