El alcalde acusa al PP de querer enturbiar la Semana Santa del 2004

El alcalde de Astorga, Juan José Alonso Perandones, acusó ayer al grupo municipal del PP de pretender enturbiar la Semana Santa de 2004 con unas declaraciones remitidas a los medios de comunicación en forma de nota de prensa. Los populares denunciaban que, supuestamente, el regidor había ordenado «la realización de una transferencia de crédito por importe de 3.000 euros, desde la partida correspondiente a la Semana Santa, con destino a otra partida presupuestaria destinada a festejos populares». A preguntas de este periódico sobre la veracidad de dicha información, Perandones la negó y aseguró en otro comunicado que el Ayuntamiento pagó dicha cantidad «a la junta profomento (de la Semana Santa) el día 25 de febrero de 2004 para sufragar el importe de la factura presentada por esta asociación» el día anterior, factura correspondiente a gastos de organización del certamen de bandas de Pasión de este año. El alcalde consideró la afirmación del PP un «despropósito» y añadió que en la resolución de la alcaldía del pasado 25 de febrero, en la que se habría producido según el PP la supuesta retirada de dinero, «consta que se ordena pagar a la junta profomento estos 3.000 euros» para el certamen de bandas. «Sólo cabe lamentar una vez más a qué extremos llega la imprudencia de algunos de estos concejales», señaló Perandones. Organización del certamen La resolución, a la que ayer tuvo acceso este periódico, ordena la transferencia de 3.000 euros de la partida de Semana Santa a la de festejos populares y el gasto de 3.000 euros a favor de la junta profomento «en concepto de organización de la XI edición del certamen de bandas de Semana Santa 2004». El servicio municipal de intervención vinculó esta modificación con cuestiones operativas en el pago a profomento. El alcalde, que llegó a notificar en su comunicado el número del talón bancario de 3.000 euros entregado a profomento -el 1 969 488 3-, dijo haber constatado «la falta de estilo, y de aprecio por la ciudad de algunos de estos concejales, que un día sí y otro también no tienen reparo en buscar la confrontación incluso valiéndose del buen nombre de asociaciones o instituciones». El regidor lamentó «que de forma premeditada busquen una vez más algunos de estos concejales la confrontación en los momentos más inoportunos, o si se quiere en los momentos que mayor daño pueden hacer a la imagen de la ciudad, pues a pocos se les escapará que su propósito es enturbiar la Semana Santa de 2004, que se inicia dentro de unos días». Pedirán explicaciones El grupo municipal del PP, por su parte, anunció en el comunicado a los medios que pedirán explicaciones en el pleno de hoy sobre esta cuestión, que consideran «síntoma evidente de incompetencia e improvisación». Además, denunciaron «la falta de compromiso del gobierno municipal» hacia la Pasión, declarada de Interés Turístico Regional «a la que se aporta una cantidad económica irrisoria en comparación con su repercusión y con otros actos a los que desde el Ayuntamiento no se escatima en aporte económico». El PP también preguntará hoy al PSOE por una moción de la UPL de septiembre de 2003 que proponía la supresión urgente de barreras arquitectónicas, que el grupo estima ha sido obviada por el equipo de gobierno, pese a que «salió adelante con el voto favorable de todos los concejales presentes», y por la marcha de su solicitud y de la UPL de instalar equipos de megafonía y de grabación de las sesiones plenarias. Mientras, el PP también criticó «el uso partidista y la politización» que, a su juicio, realiza la concejalía de Servicios Sociales de los actos que ésta organiza. Los ediles aludieron en concreto a la Semana de la Mujer, de la que aseguraron que no se les facilitó información sobre los actos programados y que se les convocó con escasas horas de margen a la conferencia de Francisco Vázquez, alcalde de La Coruña. Esta actitud pretendía, según los ediles, «negar en la medida de lo posible» la participación del grupo en los actos municipales. Los ediles criticaron que el programa de las jornadas incluía una conferencia de una representante política del PSOE, y consideraron que la clausura también estuvo politizada. El PP abogó por la participación en estos actos de personas desvinculadas de la política.