Los organizadores recogieron firmas en rechazo de las nuevas restricciones en el Cares y el Sella
El festival de la trucha recupera las protestas por los recortes a la pesca
Los participantes mostraron pancartas contrarias a la nueva orden de la Junta, que limita las capturas
Varas decenas de vecinos de Valdeón se dieron cita ayer en la bolera de Posada durante la quinta edición del festival de la Trucha, fiesta que comenzó en las primeras movilizaciones de los valdeoneses contra las restricciones a la pesca en sus ríos, y que coincide con el primer domingo de la temporada de pesca. En esta ocasión, ha vuelto a resultar una celebración reivindicativa tras las nuevas restricciones establecidas por la Junta de Castilla y León en la orden de pesca sobre los ríos Cares y Sella. El clima fue festivo, amenizándose la comida con gaita y tambor, pero no faltaron las pancartas de protesta contra las limitaciones existentes ni los motivos alusivos al sentimiento de proximidad de muchos valdeoneses con la vecina Asturias. El tema de conversación mayoritario en la bolera, mientras se daba cuenta de más de un centenar de kilos de carne a la brasa y chorizos asados, giró en torno a los recortes derivados de la figura del parque nacional y la escasez de compensaciones recibidas a cambio. El Ayuntamiento y las juntas vecinales, según se convino en la reunión realizada el pasado viernes, realizaron una recogida de firmas en rechazo a las limitaciones impuestas tanto por el parque nacional como por el parque regional. En el texto de cabecera se refleja la insatisfacción de los vecinos por no encontrar en la Administración de ambos espacios naturales ningún signo del desarrollo que preconizan y del que deberían ser motores. La recogida de firmas continuará durante los próximos días y se hará extensiva también a los vecinos de Sajambre. Esta celebración se hace posible gracias a la disposición de unos cuantos vecinos que, voluntariamente, colaboran en la atención de las parrillas y todo lo necesario para que la fiesta pueda realizarse. Económicamente también colaboraron el Ayuntamiento y las juntas vecinales de Caín, Santa Marina y el Real Concejo de Valdeón, amortizándose parte del gasto con los cinco euros que cada participante pagó al comenzar el evento.