Los estereotipos que se relacionan con los drogadictos ya no son ciertos, según las estadísticas
El perfil del toxicómano es cada vez más joven, según Proyecto Hombre
El consejo municipal insiste en que la única medida contra las drogas es la prevención
Dos jóvenes consumen cocaína, esnifándola por la nariz a través de un canutillo de papel
Los integrantes de la mesa redonda organizada por el Consejo Municipal de Drogodependencias en la Casa de Cultura de Villablino, analizaron el papel de la comunidad y la familia en la reducción de riesgos frente al consumo de estupefacientes. Además de insistir en resaltar que la prevención sigue siendo la fórmula mas eficaz para hacer frente a este problema, y dejar claro que todos los colectivos deben implicarse en este esfuerzo para garantizar su eficacia, también se advirtió de que los estereotipos relacionados con su consumo, impiden que se puedan llevar a cabo con eficacia diversas actuaciones. La socióloga y responsable del plan de drogodependencias en San Andrés del Rabanedo, Carmen Mayo, sentenció que «el discurso distorsionado que muchas veces se hace sobre las drogas conduce a errores» que pueden incluso favorecer su consumo. Según aseguró, la droga no está instalada en una clase social baja o marginada, sino que es más habitual entre los integrantes de clases más altas o pudientes, «porque su disponibilidad económica les permite consumir más de todo, incluso de drogas». También afirmó que identificar droga con delincuencia «sólo es cierto en determinados casos», y negó que la forma de vestir, el look , o las «pintas» de un joven, impliquen que consume estupefacientes. Por eso insistió en erradicar estos estereotipos y extender las tareas de prevención y concienciación a las denominadas drogas legales, como el alcohol, cuyo consumo está bien aceptado por la sociedad. Por su parte el director de Proyecto Hombre, Angel Rodríguez, desveló que últimamente ha variado el perfil de las personas que piden ayuda, y ahora las personas que acuden a este centro han cambiado la heroína por otras drogas como la cocaína, son muy jóvenes, - a partir de 14 años-, y con nivel cultural universitario. Por eso Proyecto Hombre ha tenido que modificar sus sistemas de intervención, y encaminarlo en mayor medida a la familia, insistiendo en la prevención. El representante de las APAS, Francisco Fernández Gatón, denunció la escasa participación de la sociedad en las tareas de prevención, y apuntó como una de las causas que favorecen el consumo de drogas en la juventud, la falta de diálogo en el núcleo familiar.