Bendito pan

DE MÚSICA el que hemos, probado, saboreado, palpado... en Veguellina de Órbigo gracias a dos grandes organizaciones musicales, de enorme valor artístico popular. Una la banda Sones del Órbigo, nos metió de lleno en un recorrido mágico a través del cine en su actuación del pasado viernes con motivo de la 21ª Semana Cultural de Veguellina de Órbigo. Nos metió en el mundo de la imagen gracias a una enorme pantalla donde se hizo un espectacular recorrido por los mejores momentos del cine muy bien documentado además por los comentarios del narrador y trompeta de la banda Guillermo Alonso. Metió a los asistentes en el corazón de la música con unas interpretaciones tan emotivas como soberbias. Decir que desde hace tres años que comenzara su andadura, esta banda «Sones del Órbigo», compuesta por músicos de los cuatro pueblos del ayuntamiento y dirigida desde el inicio por un flamante Luis Martínez García de Longoria, ha conseguido una superación vertiginosa de interpretación. ¡Bravo banda! Otra de las organizaciones de enorme valor artístico popular y musical es nuestra «Coral Órbigo, que el sábado nos deleitó con un concierto digno de elogio y que emocionó a los asistentes porque se puede concebir el trabajo que queda detrás de cada interpretación. Nos sentimos orgullosos de tener una Coral de un nivel tan superior que puede ser nuestro orgullo en cualquier lugar en el que nos represente. El público comprobó con enorme satisfacción como su nueva y joven directora Raquel Pérez Martínez, ha conectado con los miembros de la «Coral Órbigo» de una manera tan positiva que les ha traspasado su energía y su saber. ¡Bravo Coral!. La cazuela de Manuela: Propone una receta popular: Pan bendito de música Ingredientes: Banda musical Sones del Órbigo / Conjunto de voces Coral Órbigo / Público / Organizadores y Patrocinadores de la Semana Cultural / F. Santiago Mateo Castro, coordinador de la Semana Cultural Preparación: En la harina rica y evolutiva del pueblo, extendemos a la Banda Sones del Órbigo y a la Coral Órbigo, añadimos la hidratación de un público entregado a la cultura musical y ponemos la sal necesaria que no es otra que la mano que coordina. Amasamos con cariño durante el tiempo que duran los conciertos y tendremos que al salir de la sala hemos conseguido dar forma y sabor a un pan que nos ha alimentado el espíritu, el recuerdo y la mente haciéndonos más cultos y un poco más dignos. La cultura es el mejor pan del pueblo, por eso si todavía no les has visto en acción no te pierdas las próximas actuaciones de la banda Sones del Órbigo ni de la Coral Órbigo.