Cuatro mineros de HBG presionan con un encierro en el ayuntamiento

Cuatro trabajadores de la empresa minera Hijos de Baldomero García (HBG) permanecen encerrados desde la mañana de ayer en el salón de plenos del Ayuntamiento de Villablino para reivindicar que la dirección de la compañía atienda sus peticiones en la negociación del convenio colectivo. La nueva medida de presión fue adoptada en el transcurso de una asamblea celebrada por la mañana y, según advirtió el presidente del comité de empresa, Celestino Cotarelo, «si en esta semana no se consiguen avances en las negociaciones, a partir del próximo lunes empezaremos nuevamente con otro tipo de movilizaciones, además del encierro en el Ayuntamiento». Cotarelo subrayó que, «de momento, no vamos a mantener el piquete hasta el viernes como prueba de voluntad negociadora por parte del comité, aunque hoy (por ayer) y mañana (por hoy) tendremos nuevas reuniones. A lo largo de la semana no se ha avanzado nada, ya que las posturas siguen siendo las mismas por ambas partes». Por su parte, los sindicatos CC.OO., UGT y USO de Laciana reiteraron su apoyo a las reivindicaciones del comité de empresa y trabajadores de HBG e instaron a la compañía a que se siente a negociar el convenio colectivo, que lleva 18 meses de retraso. El secretario comarcal de CC.OO., Guillermo Murias, pidió a la Subdelegación del Gobierno y a la Junta «que hagan un llamamiento a la empresa para que abra una vía de negociación y se ponga fin a un conflicto que ya se está dilatando demasiado en el tiempo», señaló. Llamamiento a la empresa Aseguró que «esta medida de presión no es una amenaza, sino un aviso de que no vamos a bajar la guardia, pues nosotros lo que demandamos es una minería con derechos y puestos de trabajo estables». El secretario comarcal de USO, Paulino Fernández, se pronunció en los mismos términos que Murias y advirtió a la empresa de que «sí en esta semana no se encuentra una solución, la próxima plantearemos nuevas movilizaciones en el conjunto de la ciudadanía». La huelga en HBG se inició hace un mes debido al estancamiento de las negociaciones del convenio colectivo, que tendría que haberse firmado hace año y medio. Los trabajadores reclaman una subida del IPC real para los años 2003, 2004 y 2005, además de un compromiso empresarial que permita mejorar el rendimiento de la explotación y aumentar la producción, mientras que la empresa minera ha planteado la posibilidad de sustituir 24 puntos del convenio, compensando su pérdida con una prima económica. Aún no hay acuerdo. «El encierro no es una amenaza, sino un aviso de que no vamos a bajar la guardia» GUILLERMO MURIAS Secretario Comarcal de CC.OO.