Modino se empacha de gas y de kas

LA LLEGADA del gaseoducto La Robla-Guardo, a su paso por el pueblo de Modino, ha causado cierta preocupación dado que atraviesa parte del casco urbano y como la prensa se hizo eco, algo que no gusta a quienes se mueven entre el silencio y la oscuridad del que hacer local, se convocó una reunión entre los representantes de la empresa, la junta vecinal y los vecinos. Al llegar al pueblo sorprende la reducida concurrencia ante un problema que se anunciaba alarmante por explosiones e inflamaciones de gas, «que no de kas». Eran tan pocos que se diferenciaba bien quienes eran unos y otros. Unos de camisa del algodón y maletín y los otros de camisa de faena. «¿A quien se le ha ocurrido convocar una reunión a las 8.30 horas que es cuando se ordeña en el pueblo?», dijo un vecino apenas empezó la reunión. Las cosas ya no iban por buen camino y alguno que otro arrugó el hocico. A medida que se ahonda en el tema se descubre que la junta vecinal de Modino conocía el trayecto y no alegó nada; pero ahora había convocado una reunión. Además ni el Ayuntamiento de Cistierna se preocupó porque el gaseoducto atravesara el casco urbano. Ante esta indiferencia de administraciones no es de extrañar que los trece vecinos afectados firmaran las compensaciones y más, cuando a la junta vecinal el trayecto le atraviesa cuatro caminos, dos eriales, dos montes bajos y un prado de regadío e incluso a la comunidad de regantes de Modino se le informa que le afectará tres regueras y una acequia, y no dicen nada. Pero en el 2002, año de las supuestas alegaciones era más importante el «kas» que ahora el «gas».