El Ayuntamiento y Renfe cerraron ayer el vial antes de que entre en servicio la nueva pasarela
La supresión del paso a nivel obliga a habilitar taxis para los vecinos
Las obras de mejora dejan la zona sin barreras ni semáforos, pero valladas por seguridad
Durante el día de ayer quedaron definitivamente derribados los semáforos y las barreras de los pasos a nivel de la calle Ramón y Cajal, vallando con estructuras metálicas el paso por las vías debido a motivos de seguridad. De esta forma, los ciudadanos que viven desde el paso en dirección a Lorenzana, al cuartel de la Guardia Civil y al El Rabizo ya no pueden acceder hasta el casco urbano a pie y tendrían que bordear un amplio camino para llegar hasta el centro de la localidad roblana, incluso andando un buen trecho por la nacional 630. Por este motivo, el Ayuntamiento de La Robla, ha llegado a un acuerdo con la empresa que ejecuta la supresión de los pasos a nivel, para habilitar a partir de hoy miércoles, un servicio de taxis con el fin de acercar a estos vecinos que quedan alejados desde sus domicilios habituales. En unos bandos expuestos por la localidad, el horario de los taxis con salidas al casco urbano será desde las 8,30 hasta las 13,30 por las mañanas y desde las 16,30 hasta las 19,30 horas por las tardes, con salidas desde La Cabaña y el cementerio antiguo, siempre con intervalos de una hora. El regreso y horario desde el centro hasta sus domicilios será por las mañanas desde las 10,45 hasta las 13, 45 y por la tarde en horario de 17,45 hasta las 20,30 horas, con salida desde la Casa de la Cultura. El alcalde roblano, José Luis García, dijo que «se ha llegado a un acuerdo con la empresa para ofrecer un servicio a los vecinos afectados habilitando taxis en disitintos horarios, un tiempo que se prolongará si hay normalidad en las obras por espacio de unos 10 días», además aseguró que «Renfe ha eliminado los semáforos y las barreras y por motivos de seguridad los peatones deben de atenerse a estas normas, que a corto plazo será un gran beneficio para todos los ciudadanos, al eliminar el tráfico pesado por la villa y también en ganar en materia de seguridad». La supresión conlleva también durante los próximos días, la colocación de dos grandes grúas para colocar las vigas correspondientes en las obras que se están acometiendo en la eliminación de los pasos de Renfe por el casco urbano». García ya había mostrado su malestar debido a que la empresa que está ejecutando la supresión de los pasos a nivel «ha cortado el paso de los vehículos en la calle Ramón y Cajal, sin ningún tipo de autorización por parte de este ayuntamiento, lo que está provocando un serio caos circulatorio, sobre todo a la hora de la salida de los trabajadores de la cementera, en la hora punta del mediodía».