La falta de aparcamientos en el casco urbano impulsa otras alternativas

Los martes y los sábados, en función de la afluencia de coches, el Ayuntamiento ha decidido cerrar el casco amurallado de la ciudad para que sólo puedan acceder los residentes que dispongan del pase de acceso. El pasado martes, a las once de la mañana, la policía local cortó el acceso al centro de la ciudad ya que según indicó Joaquín Carro, concejal, resultaba imposible encontrar aparcamiento a esas horas. La medida se ha adaptado otros años anteriores y se ejecuta en función de la fluidez de coches que hay en cada momento y según el criterio de la policía local, por ello a los largo del día los agentes municipales pueden abrir o cerrar el paso al interior de la ciudad como indicó el edil. Medidas Debido a las quejas que ha suscitado la medida, el Ayuntamiento está estudiando una serie de alternativas. Una de las medidas que están estudiando en la adecuación de la plaza de San Roque como aparcamiento. El inconveniente que ofrece dicho lugar es la dificultad de los accesos a él. Técnicos municipales han estado estudiando el problema y sus soluciones. Una de ellas es la de realizar un acceso recto a través de la bajada del Postigo. Otra de las posibilidades es la construcción de un muro de contención que ensanche la bajada del Postigo y posibilite construir una serie de aparcamientos en batería en el mismo nivel. Otras de las alternativas que se están pensando es la construcción de un párking subterráneo en la plaza de los Marqueses y el párking del Melgar.