El Ayuntamiento avanza en los trámites de la comisaría de policía

El Ayuntamiento ha dado un nuevo paso en los trámites administrativos previos para la construcción de la nueva comisaría del Cuerpo Nacional de Policía en Astorga. El alcalde de la ciudad, Juan José Alonso Perandones, firmó ayer en la cámara de propiedad la segregación de la parcela dónde se ubicará dicha comisaría, que consta de 460 metros cuadrados, para su posterior cesión al Ministerio del Interior. El solar completo, de propiedad municipal, tiene unas dimensiones mayores que los 460 metros cedidos para el nuevo edificio, por lo que el alcalde tuvo que firmar la delimitación y separación dejando los metros correspondientes para el proyecto y respetando el terreno que ya ocupa el albergue de peregrinos. Un millón de euros El terreno de la comisaría, ubicado en los números 14 y 15 de la plaza de los Marqueses fue cedido en septiembre del pasado año por la corporación para los mencionados usos. La obra, que será costeada con cargo a los Presupuestos Generales del Estado de forma íntegra, requerirá una inversión de un millón de euros. El subdelegado del Gobierno en León, Francisco Álvarez Martínez, en la visita que realizó a la ciudad el pasado 18 de junio, manifestó la urgente construcción de una nueva comisaría de la Policía Nacional en Astorga, dadas las deficiencias que muestran las dependencias que ocupa esta fuerza del orden público en la ciudad. La situación actual La actual comisaría ocupa un bajo en la plaza de San Miguel y su alquiler, que costea el Ayuntamiento, ronda los dieciocho mil euros anuales. El alcalde ha expresado en repetidas ocasiones las ventajas que , a su juicio, ofrecerá la nueva ubicación de la comisaría, ya que permitirá por un lado habilitar garajes para los vehículos y tendrá una conexión rápida con la N-VI, carretera que pasa por delante del que será el nuevo edificio. Así mismo, la instalación tendrá una comunicación directa con los juzgados, situados en la misma plaza de los Marqueses. Interior planteó inicialmente trasladar la comisaría al antiguo instituto de la muralla, aunque después desechó la idea.