Diario de León

Un equipo de cuatro personas ancló la pieza a un hueco del muro en una complicada operación

La fachada consistorial luce una nueva gárgola de 400 kilos de peso

La escultura es una réplica casi exacta de la que resultó destrozada en enero del año 2002

La imagen muestra un momento de la delicada operación de ajuste de la gárgola a la fachada

La imagen muestra un momento de la delicada operación de ajuste de la gárgola a la fachada

Publicado por
Maite Almanzaastorga
León

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Un equipo de cuatro personas colocó ayer en la fachada del Ayuntamiento de Astorga la gárgola que sustituye a la que en enero de 2002 descabezaron unos operarios de la empresa que retiraba la iluminación navideña. La instalación de la pieza fue compleja, debido a su volúmen y peso, que alcanza los cuatrocientos kilos, confirmó el cantero encargado de realizar la escultura, Abel Sierra. Las labores comenzaron el pasado miércoles con la colocación de los andamios que ayer fueron utilizados para insertar la pieza en el hueco que su predecesora dejó en la fachada. Para ello fue necesario elevar la gárgola mediante una grúa unos diez metros sobre el suelo y ajustar su base a la pared. La escultura quedó anclada por sí misma al muro, aunque con posterioridad los operarios añadieron argamasa para asegurar el conjunto, indicó Sierra. El trabajo fue aún más delicado si se tiene en cuenta que las obras del edificio consistorial comenzaron en 1683 y terminaron en 1704, y que la fachada actual es la original, que fue conservada tras la reforma que en 1994 sufrió la construcción. La gárgola descabezada databa de 1873. La nueva escultura cuenta con 1,40 metros de longitud, 50 centímetros de anchura y 35 de altura, y está elaborada en piedra caliza mediante la técnica de puntos. La pieza «es prácticamente una réplica de la original», que fue utilizada de modelo a partir de la reconstrucción en la medida de lo posible de los restos que quedaron tras el destrozo, dijo Sierra. «A nuestro hijo» La obra luce, en lugar de la marca de cantero que permitiría su reconocimiento, la dedicatoria: «A nuestro hijo, Ariel Sierra Ruffilli», en alusión al primer vástago del artista. Éste empleó tres meses en elaborar la pieza, trabajo que simultaneó con otros encargos. La intervención contó con un presupuesto de 13.174,02 euros, que asumió la compañía aseguradora de la empresa de iluminación que causó los daños, previa peritación de éstos. Mientras, el Ayuntamiento acordó posponer el adecentamiento y restauración de la fachada consistorial, que pensaba acometer junto con la restitución de la gárgola, por motivos de disponibilidad presupuestaria. Un proyecto cifraba en 25.345 euros la inversión necesaria para esta labor, para cuya realización el municipio solicitó ayuda a la Junta de Castilla y León.

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