Diversión en plena naturaleza

Desde el próximo domingo los aficionados al paintball en la comarca de Laciana podrán practicar este novedoso juego de batallas con bolas de pintura, cuyo origen es americano y data de 1981. La empresa de actividades de ocio y tiempo libre, «Laciana Paintball», es la responsable de ofertar y promocionar este juego en la comarca lacianiega, además de organizar un amplio abanico de excursiones en quads para profesionales, poniendo a su disposición un guía. El juego El paintball se disputa entre dos o varios equipos y consiste básicamente en marcar en un campo de juego a los componentes del grupo contrario con unas bolas de gelatina, rellenas de colorante y biodegradables, que son disparadas por unas marcadoras de aire comprimido. Existen muchas variedades y tipos de juego, y para practicarlo es necesario equiparse con una máscara para proteger la cara de los posibles impactos de las bolas, además de guantes y un mono o vestimenta adecuada de tejido poroso para que la pintura sea visible al impacto. La idea de poner en marcha este juego en el valle partió de cuatro amigos que se plantearon la posibilidad de ofrecer una alternativa diferente de ocio y tiempo libre, aprovechando la existencia en la comarca de multitud de espacios naturales idóneos para la práctica de este juego, que está creciendo de forma muy rápida en los últimos años. El principal objetivo de la empresa, según explica uno de sus responsables, es « garantizar el entretenimiento en un entorno de compañerismo y contacto con la naturaleza, fomentando la labor en grupo, la convivencia y la diversión ante todo». El campo de juego en Laciana está ubicado en la localidad de Caboalles de Arriba, en 30.000 metros cuadrados de un paraje de bosque virgen denominado La Chinde. La actividad está dirigida a grupos de amigos, de empresa y despedidas de solteros-as, y para practicarla es necesario que los dos grupos estén formados por un mínimo de cuatro personas mayores de edad. El precio por persona es de 25 euros, incluido el alquiler de la marcadora de aire comprimido, 100 bolas de pintura y el equipo completo, formado por traje, guantes y máscara protectora. Una vez que se han disparado todas las bolas, los participantes tiene la posibilidad de continuar el juego recargando un centenar de bolas más a un precio de 10 euros. Entre los muchos beneficios que proporciona la práctica de este divertido juego, una de las responsables de la empresa organizadora, Raquel Arias, señala que el pintball «es un apasionante deporte lleno de sensaciones para disfrutar al aire libre, escapar de la monotonía, expulsar adrenalina a raudales y practicar ejercicio en equipo, disfrutando de la naturaleza y utilizando la cabeza, ya que la mejor estrategia te hará ganar». Por el contrario, el principal temor del público ante este juego es el posible dolor que puede causar la bola al impactar, algo que, según Raquel Arias, «es un temor infundado, ya que, por la protección y las mismas reglas del juego que prohíben el marcado a una distancia inferior a la de seguridad, es raro recibir un impacto en zonas no protegidas y caso de que suceda, no deja de ser una bola de gelatina la que nos golpea». De hecho, añade la responsable de Laciana Paintball, « el paintball es un deporte menos peligroso que la gran mayoría de los que se practican en la actualidad y además la climatología no es un condicionante pues se puede jugar lloviendo o nevando, ya que la vestimenta es impermeable y sólo se requiere un calzado adecuado». Las personas o grupos interesados en jugar deben llamar a los números 620. 541 000 o en la web www.adrenaliciapaintball.com .