Capital humano

ESTAMOS expectantes, a la espera de acontecimientos políticos para saber, si el tripartito anunciado como salvación del barco a la deriva va a continuar tal y como está. Algunos, pensamos que el problema solamente atañe a los lacianiegos y sus representantes políticos, pero cada día que pasa perdemos unos gramos de esperanza, sobre todo cuando vemos que a solución tiene que venir de fuera, pues si IU y el PP actúan por libre, igualmente debería de hacer el PSOE y dejarse de zarandajas, esperando que la dirección provincial haga algo que, ellos, y solamente ellos, deben de hacer. Tomar el problema tal y como está, y decidir si aceptan las propuestas de la oposición de colaborar en el gobierno municipal, o por el contrario van a continuar actuando en minoría. Si bien es cierto, que desde IU y el PP la colaboración debería de ser solidaria y no estar siempre poniendo chinas en las ruedas de la gobernabilidad municipal, por parte del PSOE debería también de verse algún tipo de gesto y no actuar siempre como si estuvieran en posesión de la verdad absoluta. Lo que sigo, desde fuera de los muros del Ayuntamiento, el ciudadano de a pie está a la expectativa de su el rumbo municipal dejará de dar vaivenes y comenzará a sentirse fuerte y firme. Pero, de lo que yo quería escribir hoy no era de esta esperanza que algunos aún tenemos en el alma, creyendo que Laciana va a comenzar a despegar de ese fondo que ha tocado ante la falta de un verdadero criterio de actuación, y no digo yo que esta falta venga solamente del gobierno actual, sino que ya viene de muy atrás y continúa instalada en los sillones municipales. De lo que quería tratar es de un tema que algunas veces he tocado de soslayo y hoy, una vez hablado con muchas de las personas inmersas en el problema trataré de analizar. Las prejubilaciones anticipadas de MSP han dado lugar a muchas cuestiones. Una de ellas es la creciente despoblación, sin que nadie actúe tratando de buscar soluciones y dar asentamiento a una población, a la que le da lo mismo estar en Laciana que en otro lugar: marchándose en la mayoría de las ocasiones ante la falta d expectativas de ocio. Pensemos que una persona que antaño ocupaba 10 horas al día en su trabajo, aunque tuviera el resto de la jornada bien distribuido y ocupase su tiempo libre en alguna actividad, hoy al disponer también de esas 10 horas ha de llenar prácticamente la totalidad del día con actividades extra laborales, pues no le está permitido trabajar de manera remunerada. Pensamos ahora en una persona que, anteriormente ya no tenía ningún tipo de distracción, como no fuera el jugar la partida en el bar, el chateo diario y el juntarse al sol en la avenida Constitución a charlar de algo. Pues este, igualmente tiene 10 horas más para no hacer nada. Por eso el problema que se plantea ahora en Laciana es, el ocupar las horas vacías de un gran número de prejubilados que son incapaces por sí solos de hacerlo. Esto debería de hacerlo el Ayuntamiento. ¿Cómo?. Pues buscando algún tipo de alternativas encauzadas de manera oficial, tales como restauración de edificios, diferentes cursos ante el problema que supone el invierno en Laciana, múltiples actividades posibles, como digo dirigidas y controladas desde el Ayuntamiento de manera oficial. Y digo lo de oficial, porque se pueden hacer clubes de diversas actividades pero todo debería de contar con algún tipo de cobertura legal ante la responsabilidad civil que implica cualquier tipo de actividad. Por eso, esperamos mucho de ese tripartito que dicen se está fraguando, esperemos que enderecen el rumbo del Valle, pero esperamos sobre todo que actúen de manera rápida en el problema que ya existe de ocupación del tiempo libre.